El Cabildo de Tenerife excluirá del futuro Consorcio de Transportes al Ayuntamiento de Santa Cruz si éste no accede a permitir la construcción de un carril bus en el eje Avenida Bélgica-República Dominicana-San Sebastián y a ejecutar diversas actuaciones en las calles de su ámbito, una cuestión considerada "vital" para fortalecer la movilidad del servicio urbano de guaguas en la ciudad y en el área metropolitana. El hecho de que finalmente el Ayuntamiento santacrucero no esté por la labor de posibilitar la construcción de este carril específico para guaguas y taxis supondrá la no renovación del contrato programa que liga a la empresa Transportes Interurbanos de Tenerife SA (Titsa), cuya titularidad es de la Corporación insular, con el consistorio capitalino, que tendrá que concursar públicamente el servicio urbano de transporte por carretera a partir de 2011, año en el que expira el citado compromiso.

Según pudo saber EL DÍA a través de fuentes del Cabildo tinerfeño y de la propia empresa Titsa, la decisión de ir por libre a partir de 2011 de la Corporación insular y su empresa de transporte es irrenunciable si no se dan las condiciones propuestas, ya que el objetivo prioritario es crear un Consorcio de Transportes en el que estén representadas todas las administraciones vinculadas de una forma u otra con el transporte y que tendrá como objetivo gestionar la movilidad en la Isla en base a una sola red general con ramificaciones coordinadas.

Reparos técnicos.- Lo cierto es que desde el ayuntamiento se han realizado continuamente reparos técnicos a los propuestas de la Corporación insular en esta materia para materializar el carril bus por el eje en cuestión, cuando los técnicos del Cabildo entienden que no hay lugar a ellos. Esta situación se ha enquistado tanto que desde la Corporación insular se ha tomado la decisión de que si la ciudad capitalina sigue en sus "trece", este alejamiento provocaría que el contrato programa que acaba en 2011 sería el último en el cual las dos administraciones están unidas en un convenio administrativo para gestionar el transporte.

Esta falta de entendimiento provocaría que el Ayuntamiento de Santa Cruz no entre en el futuro Consorcio de Transportes, que pretende la unión total del transporte, y que el consistorio se viera obligado a sacar un concurso público del servicio, con lo que Titsa se desdoblaría y el servicio urbano lo gestionaría el Ayuntamiento de Santa Cruz como quisiera, bien dándoselo a un operador privado tras concursar o gestionándolo como empresa pública.

Carril bus.- ¿Y qué ha planteado el Cabildo que el Ayuntamiento de Santa Cruz no ha visto con buenos ojos? Pues la Corporación insular ha puesto sobre la mesa la construcción de un carril bus que transcurre desde la rotonda 29 de Mayo (intersección antigua General Mola y avenida de Bélgica) hasta la futura rotonda de la Vía Litoral, en el ámbito de la delegación de Hacienda, en la antigua avenida José Antonio. Se trata de un carril central, como está dispuesto el tranvía, de doble sentido exclusivamente para guaguas y taxis, con un carril para cada lado para el tráfico del vehículo privado. En el caso de la avenida San Sebastián existiría un retranqueo para permitir dos carriles de bajada.

Las simulaciones realizadas por el Cabildo de Tenerife a través de un ordenador sobre el comportamiento del tráfico en hora punta en este importante eje determina que no sólo basta con construir el carril bus, sino que es necesario realizar modificaciones en el callejero colindante para hacerlo viable.

Esto supondría retranqueos de aceras, eliminar determinados giros a la izquierda para los vehículos privados y la eliminación de aparcamientos de superficie, sobre todo en el ámbito de la avenida San Sebastián.

Más importante aún es que la construcción del carril bus en este eje capitalino supondría la modificación puntual del Plan General de Ordenación de Santa Cruz, algo a lo que no está dispuesto el equipo de gobierno local bajo ningún concepto.

La oferta.- A cambio, en líneas muy globales, el Cabildo asumiría el coste de las obras, la inclusión del Ayuntamiento de Santa Cruz en el futuro Consorcio de Transportes, para así mantenerse en la gestión directa de los servicios globales sin tener que estar al frente de los procesos de adjudicaciones y contrataciones, y el marco de un contrato-programa.

Mañana, jueves, será un día clave para determinar qué pasará en este asunto debido a que representantes del Cabildo y del Ayuntamiento de Santa Cruz se reunirán en la sede insular para limar asperezas.