Los representantes del sector del taxi en la capital entienden que el planteamiento trasladado por el Ayuntamiento de Santa Cruz por el cual los taxistas costearían el rescate de 180 licencias en diez años es una medida "impopular" entre un sector acuciado por la crisis pero, al fin y al cabo, la única solución factible después de que las administraciones hayan dejado "meridianamente claro" que, hoy por hoy, no tienen el dinero necesario para proceder al rescate de las licencias de taxi sobrantes.

La medida que Miguel Zerolo trasladó a los representantes del sector el pasado jueves pasaría por hacer efectivo un préstamo de 10,8 millones de euros, en el que el Consistorio capitalino actuaría como avalista, y que los taxistas deberían devolver en un plazo de diez años.

Todos los representantes del sector que acudieron a la cita (José García, de la Plataforma Futuro del Taxi; José Antonio Expósito Noda, de la UTAT; Tomás Guillén de la Agrupación Profesional del Taxi; Francisco José Lee-Williams Lavers, de Teletaxi Isla de Tenerife, y Juan Carlos López, de la Asociación Taxistas de Canarias), manifestaron su apoyo a la medida, aunque dejaron claro que serán sus asociados los que decidan, mediante consulta, si apoyan o no esta medida.

En espera de perfilar todos los detalles de la operación financiera, los taxistas saben que sólo el rescate puede mejorar la situación del sector y que, además, si aspiran a que se haga en un corto espacio de tiempo (dado lo acuciante de la crisis para muchos taxistas) no pueden esperar a que las administraciones sean las que inicien el proceso.

Zerolo no fue el primero

El presidente de la Asociación Taxistas de Canarias (ATC), Juan Carlos López, ya había propuesto hace un año que los taxistas pidieran un crédito preferente con la salvaguarda de que las instituciones se constituyeran en avalistas. Por ello, se queja del tiempo perdido y de que, por aquel entonces, no se hiciera caso a su propuesta.

Durante la mañana de hoy los representantes del sector tendrán otro encuentro con el alcalde de Santa Cruz que deberá informarles sobre las condiciones que ofrece la entidad bancaria. Una vez éstas se concreten, las diferentes asociaciones realizarán las consultas pertinentes entre sus afiliados para, posteriormente, realizar una asamblea. De momento la conclusión es clara: no es la solución ideal, pero es la única que puede llevarse a cabo de forma inmediata.