Ignacio González Santiago (La Palma, 1961) asume el reto que supone una ciudad, Santa Cruz, con 28.000 parados, razón fundamental para mantener la emergencia social, al menos hasta el primer trimestre de 2010. El edil del CCN defiende la creación del nuevo organismo autónomo, el IMAS, como clave para revertir esta delicada situación. También concejal del distrito Centro-Ifara, mantiene la necesidad de desarrollar el Plan General de Ordenación (PGO) recién aprobado y propiciará la "imprescindible unidad del nacionalismo canario" a través de una próxima reunión con todos los presidentes de las fuerzas políticas que abanderan este ideal.

¿Cuál es su balance al frente de la Concejalía de Bienestar y Cohesión Social?

Pues debe ser incompleto porque acabo de cumplir ocho meses de manera oficial, ya que tomé posesión el 12 de mayo de 2009. Después de un período de adaptación comenzamos a cambiar para mejorar lo que pensamos que había que modificar. Propuse al alcalde dos grandes cuestiones para impulsar desde Alcaldía con la valentía necesaria. Por un lado, la necesidad de decretar la emergencia social, lo que hizo el 11 de mayo, para gestionar con mayor rapidez las ayudas. En segundo lugar, transformar por completo la estructura de la concejalía, para que en el presupuesto de este año 2010 se incluya la partida para un nuevo organismo autónomo, el Instituto Municipal de Atención Social (IMAS), siguiendo el acuerdo plenario de 22 de mayo del año pasado. Se han elaborado los primeros estatutos y el IMAS será muy pronto una realidad.

¿Qué desarrollo tiene el programa "Santa Cruz + Social"?

Además de las campañas publicitarias e informativas, en la práctica lo que llevamos a cabo es un zafarrancho social. El personal de la concejalía contacta con los presidentes de las asociaciones de vecinos y vamos directamente a las viviendas de los que tienen más problemas. En estos meses hemos visto de todo. Desde una familia viviendo sin ingresos y sin agua ni luz, hasta una señora que no podía moverse y sólo tenía un yogur en la nevera. Intentamos aunar la iniciativa pública con la privada, como hemos hecho con el Banco de Alimentos, facilitando los medios necesarios a través de aportaciones de los empresarios.

¿Cuáles son las ventajas del IMAS?

La principal es que todas las ayudas se van a gestionar dentro del propio organismo sin necesidad de que los expedientes vayan a otros departamentos. En nueve meses hemos bajado el tiempo de media para recibir las ayudas básicas de más de un año a unos dos meses, que ya es nuestro límite en cuanto a plazos, después del gran esfuerzo de los funcionarios, porque los expedientes tienen que pasar a otros departamentos municipales antes del cobro.

¿Han elaborado un mapa social, con diagnóstico, del municipio?

Somos el único ayuntamiento en Canarias que tiene datos, y recientes, del mes de diciembre, porque el ISTAC no elabora encuestas de población activa a nivel municipal. Encargamos la encuesta y un estudio sobre las condiciones socioeconómicas de la población de Santa Cruz. Los datos son escalofriantes. Entre ellos destacan los 28.721 parados, el 25,54% de la población activa; que el 40% de esos parados lleven más de un año desempleados, lo cual los convierte en usuarios actuales o futuros de los servicios sociales; y el hecho de que 22.000 familias vivan con menos de 1.000 euros al mes, además de comprobar la terrible tasa de desempleo en distritos como Anaga (38,42%), lo cual esperábamos por sus condiciones, pero, sobre todo, Salud-La Salle (37,70%), que es el más poblado del municipio, con 68.000 habitantes. Ofra-Costa Sur tiene un desempleo del 29,98%; el Suroeste, del 18,44%, y Centro-Ifara del 13,97%. Esta última era la media más o menos normal en la ciudad y se ha triplicado en algunos distritos, además de doblarse en el global durante el último año. Hay que hacer un esfuerzo enorme en recursos e inversión, sobre todo en Salud-La Salle.

¿Estos son los motivos para mantener la emergencia social? Claro. El alcalde ha aceptado la sugerencia de mantenerla el primer trimestre de este año y luego, con los datos de marzo, valorar si seguimos igual o no. Muchas personas han dejado ya de cobrar prestaciones o están a punto de hacerlo. Además, en la encuesta de diciembre, un 80% manifestaba estar de acuerdo con la emergencia social y un porcentaje similar apostaba por mantenerla.

¿Cuál es el futuro de El Toscal?

Como toscalero creo que al barrio lo abandonó la ciudad. El Plan Urban llega hasta las puertas, en la calle La Rosa, y eso hace que El Toscal viva de espaldas a Santa Cruz. Es una zona que se está cayendo y económicamente deprimida en el centro de la ciudad. Hay que rehabilitarlo y el PGO resulta clave para ello porque existen 12 millones de euros esperando desde 2007, a través de convenios con las otras administraciones. Y a partir de ahora hay que desarrollar el Plan Especial con el BIC del conjunto histórico.

¿Por qué apoyó el CCN el Plan General de Ordenación?

Porque Santa Cruz lo necesita. Lleva ocho años de tramitación, no se dan licencias y se paraliza la ciudad. En una situación de crisis económica y con casi 30.000 chicharreros en paro no queda otra que sacarlo adelante con responsabilidad. Lo resumiría en cuatro razones, de ellas dos sociales. Por un lado, sólo con las licencias que aguardan a ser desbloqueadas en Urbanismo se crearán 10.000 empleos. Por otro, las 3.000 VPO, con 40 millones de euros de subvención del Gobierno de Canarias, a la espera de la aprobación y con una enorme lista de peticionarios. La tercera es la rehabilitación de El Toscal para unir el barrio con el resto de Santa Cruz, mientras que la cuarta es una razón técnica, ya que el Plan es bueno, y el que diga lo contrario es malo.

¿No tuvo un discurso en exceso duro con el PSC y la Plataforma anti PGO?

Creo que aquí no ha habido un ganador. Ningún partido se benefició de lo ocurrido en dos de los días más negros para la democracia en Santa Cruz porque, por ejemplo, el PSC apareció partido en dos, con tres concejales sin acudir al pleno de aprobación. La gente pasó las peores Navidades de su vida con un PSOE respaldando y animando los argumentos de un abogado en el sentido de que los ciudadanos habían perdido su casa de repente. Es mentira, no es cierto y se empieza a demostrar, pues basta con ir a Urbanismo y comprobar que no hay problemas. Respecto al PSOE parece que se ha convertido en defensor a ultranza del derecho a la propiedad privada y no de las viviendas sociales o del derecho al trabajo de tantos parados. Algunos han llegado a decir que el equipo de gobierno ha comprado a los periódicos o los bancos y sólo resta una encíclica al Papa. Los dos días intentaron pegarnos: el primero casi me atropellan y el segundo, si no bajo el cristal, me matan con un palo. Le pedí al portavoz socialista que rechazara públicamente la violencia en la política porque los concejales del PSOE salieron por la puerta principal, sin problemas, porque allí estaban los suyos y nosotros a escondidas por ejercer el derecho democrático de votar a favor de aprobar el Plan General.