El Consejo insular de Aguas, organismo autónomo adscrito al Cabildo de Tenerife, ha aprobado la segunda fase del proyecto de estación desaladora de agua de mar de Santa Cruz de Tenerife, con un presupuesto de licitación que supera los 11,5 millones de euros.

Las obras, que supondrán la ampliación de las infraestructuras ya existentes, consistirán, fundamentalmente, en movimientos de tierra, la realización de un colector de pozos de bombeo a filtros de agua y de una balsa de neutralización, la ampliación de la nave de proceso, y labores de urbanización, informa el Cabildo en un comunicado.

Esta decisión se adoptó en el transcurso de la última sesión celebrada por la Junta de Gobierno del Consejo insular de Aguas, bajo la presidencia de su titular y responsable de Aguas de esta Corporación, Pedro Suárez. Supondrá el aumento de los recursos hídricos de la zona con calidad suficiente para compensar la merma de caudales de las captaciones subterráneas y el aumento de la demanda urbana. De igual modo, acarreará la mejora de la calidad de agua disponible que permita una agricultura sostenible.

"Esta actuación --según informa Pedro Suárez-- se enmarca dentro del convenio firmado por la Comunidad Autónoma y el Gobierno del Estado en materia de obras de interés general, por lo que la financiación provendrá de los fondos de este convenio".

Los trabajos, que cuentan con un plazo de ejecución de 18 meses están en la línea del Plan Hidrológico de Tenerife, en el que se define la necesidad de implantación y de ampliación de un conjunto de desaladoras de agua de mar con trascendencia comarcal, como es el caso de la desaladora de Santa Cruz, que está ubicada en el polígono portuario de Cueva Bermeja, en el puerto principal de la isla.