Un centenar de piezas del modisto francés Yves Saint Laurent, se exponen desde ayer en Bruselas como muestra del impacto que las creaciones y conceptos del diseñador tienen en la moda femenina actual.

"Era un visionario. El trabajo de YSL se ve en la calle, en todas partes. Desgraciadamente no se ve mucho en las colecciones de moda actuales", dijo Pierre Berger, socio y compañero del diseñador, además de responsable de la fundación que lleva el nombre de ambos y que conserva en París la obra del artista.

Yves Saint Laurent (1936-2008) "tuteó a la moda de su tiempo y a su época. Era un visionario", añadió Berger, quien también subrayó que "YSL tenía una voluntad absoluta de que la ropa se hiciera para ser llevada. Hoy yo veo que en las colecciones de moda, las prendas están ahí para complacer a los creadores de moda y no siempre para que la gente las lleve".

La muestra, organizada por el Espacio Cultural ING en la capital belga y abierta el público hasta el próximo 5 de mayo, reúne un centenar de vestidos de alta costura y prêt-à-porter, muchos de ellos expuestos por primera vez, así como numerosos documentos, en buena parte inéditos, que aportan datos sobre la creatividad de uno de los grandes maestros de la aguja.

La singularidad de sus diseños, las formas, materias y colores utilizados, así como su concepción de la alta costura muestran el pensamiento de un diseñador que concibió y logró aunar dos conceptos tan inicialmente contrapuestos como alta costura y democratización de la moda.

"Sus creaciones de la línea Saint Laurent Rive Gauche recuerdan cómo el modista llevó el diseño a la calle y su interés en hacer vestidos que sirvieran verdaderamente", explica la comisaria de la muestra, Florence Muller.

"Siempre estuvo en contra de la moda que miraba al pasado y al futuro. Para él la moda era una bisagra que se conjugaba en el presente", explicó Berger.

La exposición muestra hasta qué punto las creaciones de YSL han transformado profundamente el universo de la moda femenina y resalta el genio de este brillante creador que supo entender y acompañar a la mujer moderna en la segunda mitad del pasado siglo, señalaron los organizadores.

El talentoso YSL trasladó en la década de los sesenta y setenta piezas clave de la sastrería masculina como el traje de pantalón, el esmoquin, las saharianas o los pantalones al guardarropa femenino para no abandonarlo jamás y dotó a esas prendas de una seducción que ya es inseparable de su nombre. "Niño prodigio, Yves Saint Laurent tuvo la visión de una moda que vibraba con su tiempo, en el cruce entre realismo e idealismo, y que en sí misma lleva el deseo de gustar y de ser amado", señaló Muller.

Berger subrayó a Efe que Saint Laurent "es profundamente actual. Él está en la calle, está en las mujeres con pantalón, en las prendas en cuero. Todo eso es Yves Saint Laurent el visionario".

Para Dominique Bauthier, una de las especialistas implicadas en la muestra, el creador francés "acompañó a la mujer en su proceso de emancipación en los años 60-70" del pasado siglo.

La muestra se completa con la colección de muñecas de papel y sus vestidos recortables que Yves Saint Laurent creó para la casa de muñecas que construyó en su infancia, que pobló con maniquíes de papel en los que imprimió sus sueños de diseñar y el estilo que le situó después entre los grandes de la moda.