La nueva entrega de Usagi Yojimbo -"El regreso del alma negra", de Stan Sakai-, retoma la narración de los hechos donde quedaron en el tomo anterior con distintos grupos de cazarecompensas a la búsqueda de la poseída Inazuma. Esta, gravemente herida, se esconde en un viejo templo mientras Usagi se une a viejos camaradas como Gen, Perro Callejero o el sacerdote Sanshobo y un misterioso y despiadado samurai para encontrarla antes que el resto. Cada miembro de la partida tiene sus propios intereses en encontrar a la mortífera espadachina.

Sakai ha llegado a una madurez creativa en la serie del conejo samurai en la que no necesita mantener a su protagonista en primer plano para mantener el interés por la historia. De este modo, a lo largo de las aventuras recogidas en este volumen la presencia de Usagi es en buena medida testimonial, centrándose en el desarrollo de la adictiva trama en la que los encuentros y desencuentros -en la mejor tradición de Kurosawa cuya influencia es bien patente en toda la obra- entre los distintos personajes es constante.