Las compañías de telefonía móvil han dado, en los últimos años, un vuelco a la manera de hacer negocio y a la imagen que proyectan hacia los clientes. Lejos quedan las grandes corporaciones tradicionales y su impositiva manera de proceder, ahora lo que está rompiendo el mercado son las compañías low cost. Estas compañías de bajo coste se han hecho un hueco muy importante en el campo de la telefonía y empresas como la low cost ''Lowi'', se han erigido como líderes de un sector del que parecían monopolizar eternamente las compañías tradicionales.

Las claves de este éxito empiezan por una manera nueva de comunicarse con los clientes. Han quedado obsoletas las viejas maneras, los medios online ganan fuerza y una imagen corporativa más cercana ayuda a que los consumidores, sobre todos los jóvenes, confíen en las compañías de bajo coste más fácilmente. Es evidente que esto no acaba aquí, las low cost se basan en ofrecer un servicio de la más alta calidad al mínimo coste, es decir, una calidad propia de las empresas tradicionales a un precio mucho menor, además, una de las ventajas más importantes que ofrecen estas compañías consiste en la posibilidad de confeccionar una tarifa a medida. La cantidad de megas o de minutos, así como bonos y demás productos similares, serán seleccionados por el propio cliente, sin que esto conlleve ningún problema. El consumidor siempre puede ajustar las características del paquete que contrate a sus necesidades actuales. Esto supone una ventaja novedosa y atractiva, alejada de los contratos fijos que la telefonía móvil, a través de los gigantes del sector, había normalizado en los últimos años. Además, se están incorporando opciones en las compañías de bajo coste para hacer todavía más flexible la tarifa, como compartir los megas que te sobran con algún conocido que los necesite o acumularlos para el mes siguiente.

En estos momentos cualquier ahorro es una opción interesante, más teniendo en cuenta que se trata de un gasto tan imprescindible como el teléfono móvil, que ya es parte de nuestra rutina diaria. Las compañías low cost son un soplo de aire fresco para un consumidor que, en el sector de la telefonía móvil, lleva muchos años gastando demasiado dinero.