El portavoz del PP en el Ayuntamiento de Guía de Isora, Carlos Álvarez, criticó ayer los criterios del gobierno local del PSOE y, sobre todo, la subida impositiva aplicada a los vecinos. Los conservadores censuran que la recaudación por el IBI aumenta en 376.339 euros, pasando de 3,653 millones en 2012 a 4,029 en 2013, así como la subida en el IAE y el impuesto sobre tracción mecánica. Los populares también cuestionan la ficha financiera prevista para el plan de barrios, ya que, a su juicio, los 142.000 euros reservados "no tienen aún encaje en ningún proyecto", por lo que, según sospecha, "este dinero lo necesitan los socialistas para dedicarlos a objetivos confusos e inciertos". Los miembros del PP recuerdan que las transferencias corrientes del Estado aumentan, "mientras que la financiación del Gobierno regional disminuye otro año más". En su opinión, las cuentas obedecen al "oscurantismo sistemático del gobierno", algo que se refleja "en el recorte destinado a política de personal". Los conservadores se preguntan si el equipo que dirige Pedro Martín "piensa desprenderse de laborales o de personal de confianza del PSOE". Asimismo, lamentan que se destine "la misma cuantía económica al banco de alimentos que al capítulo de Fiestas", al tiempo que insiste en los gastos en publicidad y propaganda, por mucho que bajen en 60.000 euros en relación a 2012, en comparación con algunos para estudiantes.