La falta de interés para recuperar, mejorar y regenerar las playas de Las Galletas está causando que el litoral de este municipio de Arona se encuentre cada vez más deteriorado, circunstancia que preocupa a responsables de la asociación de vecinos.
La carencia de actuaciones está provocando que las mareas "escarben" en la playa histórica del barrio, más conocida como Charco del Baño, y saquen rocas de grandes dimensiones en la misma orilla.
La presencia de estas rocas "hace que muy pocos usuarios elijan esta playa para bañarse debido a la incomodidad y peligrosidad que representan", señalan responsables del colectivo vecinal.
Explican que el problema en esta franja costera del municipio surgió "cuando se construyó el muelle que tenemos en el barrio, pues no se tuvo en cuenta la dinámica de litoral".
"El puerto nos ha destrozado la playa porque el ciclo de las mareas no se completa. Somos conscientes de que esta infraestructura es muy importante para los pescadores y no pretendemos que se elimine, sino que desde el Ayuntamiento de Arona se hagan las gestiones necesarias con Costas para aplicar todas las medidas correctoras que sean precisas para contar otra vez con el charco del baño", comentan miembros de la citada asociación.
Sin voluntad política
"Los distintos gobiernos municipales que han pasado por el consistorio desde que se construyó el muelle siempre nos cuentan la misma historia, que ellos no son competentes para actuar en el litoral.
Ahora bien, tampoco vemos que tengan voluntad política para presionar a Costas y que actúe en consecuencia", explican.
Los vecinos resaltan que "en su día se colocaron unas piedras grandes en la otra punta de la playa, que se dijo que servirían para frenar el flujo de las mareas. El remedio ha sido peor que la enfermedad porque no solo no se ha frenado el continuo deterioro de la playa, sino que además han colocado unas rocas que afean el encanto natural" de esta costa, manifiestan.
"Si los nacionalistas aroneros no se toman en serio el problema que tenemos en la actualidad en la playa histórica de Las Galletas, dentro de unos años el poquísimo espacio de baño que queda en esta parte de la costa se convertirá en un malpaís", advierten los residentes.
"Por lo tanto, la gente no viene a Las Galletas no por la crisis económica que se viene padeciendo desde hace unos años, sino porque las playas no están en condiciones y los bañistas prefieren desplazarse hacia otros punto del litoral" de la comarca, expresan responsables del colectivo vecinal.
"Es más, la playa de El Varadero tampoco se cuida y los fondos están muy revueltos, situación que empeorará una vez el nuevo emisario comience a botar basura residual", se lamentan.