La Ictioterapia, o tratamiento de pies y manos en el agua a través de mordiscos por los pequeños peces Garra Rufa, triunfa entre los turistas y residentes del sur de Tenerife, pues ya hay abiertos tres locales de este tipo y se esperan inaugurar más en los próximos meses, explica el director de Royal Fish Spa, Ángel Morales.

En Turquía, hace cientos de años que los peces Garra Rufa sanan problemas de la piel gracias al poder de sus pequeños mordiscos y succiones.

Esta terapia, sólo conocida por los habitantes de la zona del Kangal, fue descubierta por turistas y desde allí extendida a los centros de belleza.

Ahora este tratamiento es la la última moda en pedicura y un negocio de éxito, según explicó Morales.

En Tenerife comienza a tomar auge racias a la iniciativa de un empresario polaco que ha montado la cadena Royal Fish Spa.

Los tres establecimientos están situados en Puerto Colón, Playa de Troya y Las Vistas, en los municipios de Adeje y Arona.

Provistos de peceras donde los clientes, por siete euros quince minutos, y doce euros si son dos, meten los pies, previamente lavados, en agua templada.

Los ingleses son mayoría pero también españoles, como Pilar, que según su marido, quien espera fuera, "lo experimenta todo".

Pilar ha sentido "unas cosquillas tremendas" mientras los peces "no paraban de comer", cuenta con una sonrisa.

Estos pequeños mordiscos no sólo quitan las células muertas de los pies, sino son "relajantes, calman el estrés", asegura el director de Royal Fish Spa.

Próximamente abrirán dos locales más, en Candelaria y en el Puerto de la Cruz, ante la "sensación de esta terapia entre los turistas y los residentes", relata.

Otra de las ideas, según este empresario canario, pasa por establecer convenios con el Gobierno de Canarias para ofrecer estos servicios en algunas playas así como en spas.

Algunos hoteles que ofrecen servicios ''wellness'' ya han pensado en introducir la llamada ictioterapia, siempre con los controles sanitarios e higiénicos adecuados.

"Debemos tener un control sobre el agua y sobre los peces", dice Ángel Morales.

Algunos estudios dicen que la ictioterapia puede ser muy beneficioso para enfermedades de la piel como la psoriasis, aunque la mayoría de los clientes simplemente disfrutan de un agradable placer mientras el pez "muerde" las piernas.