El alemán detenido la pasada semana en Lloret de Mar (Girona) acusado de haber degollado en octubre a su pareja de 20 años en la localidad alemana de Freyung y haber huido después a España con el bebé de ambos, de tan sólo 18 meses, aceptó ser entregado a Alemania.

El juez de la Audiencia Nacional Santiago Pedraz le tomó declaración ayer declaración y acordó su ingreso en prisión provisional a la espera de que se formalice su entrega a Alemania, donde podría ser condenado a una pena de 15 años de cárcel, informaron fuentes jurídicas.

La Policía Nacional localizó al presunto asesino en una habitación de un apartahotel de Lloret de Mar, donde se alojaba y en la que fue detenido por especialistas del GOES.

Los hechos por los que era buscado sucedieron hace menos de un mes, aunque los investigadores aún no han podido precisar la fecha exacta del asesinato, si bien el detenido llevaba un tatuaje reciente con la fecha 27-10-2016 en la que supuestamente se cometió el asesinato.

Los agentes de la Policía alemana localizaron el cuerpo sin vida de su joven pareja en su apartamento de la localidad bávara, metido en sacos de basura y con graves cortes en el cuello que acabaron con su vida.

Su pareja y presunto autor de los hechos huyó con el hijo de ambos, de apenas 18 meses, llevándose además el teléfono de la mujer con la intención de mantener activos sus perfiles en redes sociales y despistar así a los agentes, según informó la Policía Nacional.

Días después, el pasado 7 de noviembre, desde el perfil de la víctima en Facebook, subió una foto con su hijo junto a la Torre Eiffel en París.

Las autoridades judiciales alemanas dictaron inmediatamente una orden europea de detención y entrega y, paralelamente, los oficiales de enlace de la policía alemana contactaron con la Policía Nacional ante la sospecha de que el fugitivo pudiera haber huido hacia España con la intención de dirigirse a algún país norteafricano.

Los agentes constataron así que el fugitivo durmió en un hotel de Tarifa (Cádiz), registrándose con la identidad de un hermano, realizó dos reintegros en cajeros automáticos de Valladolid por 500 euros cada uno, o transitó por la autopista AP-7, siendo detectado en los peajes de Torreblanca (Castellón) y posteriormente de Martorell (Barcelona). Durante toda la investigación y seguimiento de las pistas obtenidas, los agentes tenían un objetivo principal, según informa la Policía Nacional: localizar en perfecto estado el pequeño de 18 meses sobre quien se había dictado una orden de protección. Agentes del Grupo Operativo Especial de Seguridad (GOES) procedieron a arrestar al sujeto en su habitación y adoptaron las medidas de protección sobre el menor.