El Supremo confirmó ayer la condena a 18 años de cárcel impuesta por el Tribunal Superior de Justicia de Galicia a cada uno de los padres de Asunta Basterra por el asesinato de la niña, su hija adoptiva.

El tribunal gallego desestimó en marzo de 2016 los recursos de los padres de Asunta Basterra, cuyo cuerpo sin vida fue hallado el 22 de septiembre de 2013 sobre una cuneta en las cercanías de Santiago de Compostela.

El Tribunal Supremo, de este modo, ha rechazado los recursos de los condenados, en una decisión adoptada por mayoría del tribunal encargado del asunto.