El guarda rural del coto de caza de Igueste de San Andrés sorprendió el pasado domingo a un cazador que se hallaba en el mencionado espacio con una escopeta y dos perros perdiceros, sin tener autorización para desarrollar la actividad cinegética por parte del titular.

Los hechos ocurrieron a última hora de la tarde. El guarda rural informó al mencionado cazador de que iba a ser denunciado ante el área de Medio Ambiente del Cabildo de Tenerife.

Además, su escopeta debe ser entregada en el área de Intervención de Armas de la Guardia Civil.