Una mujer llamada Sandra Monroy Molina, natural de Honduras pero nacionalizada española, está reclamando ante las autoridades reconocer el cadáver descubierto flotando en el río Guadalquivir a la altura del Muelle de la Sal el pasado viernes 5 de agosto, al sospechar que pudiera ser el cuerpo de su padre, quien lleva desaparecido desde el pasado jueves 4 de agosto.

Así, esta mujer ha manifestado este viernes a Europa Press, a la salida de los juzgados del Prado de San Sebastián tras realizar una gestión respecto a este asunto, que su padre, Marco Antonio Monroy Polanco, de 80 años de edad, despareció el pasado 4 de agosto, día en el que vestía un "pantalón vaquero negro y un polo color azul". Ella misma ha emprendido la búsqueda, incluso colgando carteles según ha relatado, en Triana y el entorno de la plaza de Cuba.

En ese sentido, ha narrado que cuando tuvo constancia del rescate de dicho cadáver la noche del viernes 5 de agosto, comenzó a pensar que se trataba de su padre. Pero según su relato, pese a diferentes gestiones ante las autoridades, no logra acceder al cadáver para aclarar si se trata o no de su padre. Según expone, fruto de sus gestiones la Policía le ha practicado unas pruebas AND, pero "hasta el momento no tengo respuesta, a pesar de llevar ocho días insistiendo en que me dejen reconocer el cadáver".

Desde las dependencias policiales encargadas de esta investigación, según narra, los agentes avisan de que para el cotejo necesitan una huella dactilar de su padre, para lo que se habrían puesto en contacto "por teléfono" con la Embajada de Honduras en España. "No les van a contestar porque el teléfono no lo cogen", avisa no obstante. Sandra Monroy, además, teme que con el puente de la festividad de la Virgen de los Reyes, "se paralice" la investigación.