La Policía de Phoenix (Arizona) vinculó hoy a un misterioso asesino en serie que ya ha matado a siete personas en esa ciudad estadounidense con un nuevo ataque que no dejó víctimas.

Este nuevo ataque, el noveno que se le atribuye, sucedió el 11 de julio pese a que la Policía no lo reveló hasta hoy porque "tomó un tiempo" a los investigadores "conectar" las pruebas y "llegar a la conclusión" de que el autor era el mismo, explicó un portavoz del cuerpo a la CNN.

De acuerdo con un comunicado policial, la noche del 11 de julio el bautizado como "asesino en serie callejero" efectuó disparos contra un vehículo con un hombre y su hijo de 4 años en el interior, que no resultaron heridos.

Ese tiroteo ocurrió dos días antes de que las autoridades dieran a conocer la existencia del asesino, que desde marzo habría actuado por lo menos nueve veces y asesinado a siete personas, siempre de noche o madrugada.

Según la cronología oficial, este asesino actuó por primera vez el 17 de marzo antes de la medianoche al herir de bala a un joven que caminaba por la calle, una acción que repitió con una nueva víctima al día siguiente, aunque ambas sobrevivieron.

Transcurridos poco más de 10 días, el 1 de abril, el individuo asesinó a su primera víctima, un hombre identificado como Diego Verdugo, frente a su casa.

Las autoridades también le responsabilizan de los asesinatos de Krystal White (19 de abril), Horacio de Jesús Peña (3 de junio), Manuel Castro (10 de junio) y Angela Linner, Stefanie Ellis y Maleah Ellis, ésta última de 12 años, el 12 de junio en un mismo incidente.

Además, le vinculan con el tiroteo de un vehículo sin ocupantes ese mismo día, el 12 de junio, y el hoy conocido.

La identidad de este "asesino en serie callejero" del que solo se tiene un retrato robot y la sospecha de que es blanco o hispano sigue siendo un misterio transcurrido un mes desde que se conociera su existencia.

Las autoridades elevaron hoy la recompensa, inicialmente de 27.000 euros, a 45.000.