La décima legislatura cerró con la tasa de criminalidad más baja de los últimos doce años -43,7 infracciones penales por cada mil habitantes- gracias al descenso del 10,9 por ciento de la delincuencia, especialmente la más grave, asesinatos y violaciones.

Son datos del balance sobre la evolución de la seguridad ciudadana en la última legislatura que ayer presentó el ministro del Interior en funciones, Jorge Fernández Díaz, que incluyó la lucha contra el terrorismo en estos buenos resultados.

Así, las fuerzas de seguridad arrestaron a 338 presuntos terroristas en estos últimos cuatro años, de los que 177 estaban relacionados con organizaciones yihadistas y 161 de ETA.

Fernández Díaz atribuyó el positivo balance de la criminalidad a la eficiencia y uso racional de los medios a pesar de la crisis económica, a la capacitación y profesionalización de las fuerzas de seguridad, al análisis de la criminalidad que permite medidas de prevención y a los planes operativos específicos.

Entre los datos ofrecidos, el titular de Interior la rebaja en 4,7 puntos de la tasa de criminalidad en la legislatura, al pasar de 48,8 infracciones por cada mil habitantes a finales de 2011 a las 43,7 actuales.

La delincuencia más violenta fue una de las que registró un mayor descenso. Los asesinatos y homicidios dolosos cayeron un 21,3 por ciento, con un total de 1.292 muertes en la legislatura. Con estos datos, España, con 0,65 homicidios por cada 100.000 habitantes, se coloca con la tercera tasa más baja de la UE, cuya media es de 1,02, y muy debajo de países como Bélgica (1,76) o Lituania, que con 5,79 tiene el peor índice.

Aunque el ministerio ofrecerá más tarde las cifras absolutas de los delitos, su titular resaltó la disminución en un 18,9 por ciento de las violaciones en los últimos cuatro años y cuantificó en 1.227 las agresiones de este tipo en 2015, muchas de ellas vinculadas con episodios de violencia de género.

Otros delitos que experimentaron una rebaja importante son los robos con violencia e intimidación, que descendieron casi un 26 por ciento; las sustracciones de vehículos (casi un 31) y los delitos contra el orden público (25,4 %).

Y con todos estos datos, subrayó Jorge Fernández Díaz que la preocupación de los ciudadanos por la seguridad ha dejado de situarse entre los primeros puestos de prioridades y mientras en 2007, según el CIS, era el mayor problema para un 18,9 por ciento de los españoles, el pasado mes de enero el porcentaje era solo del 1,9.

El ministro del Interior en funciones hizo referencia en la jornada de ayer a los planes específicos de prevención puestos en marcha durante la legislatura, como el plan contra los robos en el campo, el de robos en viviendas, el del cobre o el destinado a prevenir los delitos contra los turistas, las personas mayores y los menores en edad escolar.

Algunos de los planes específicos contra la delincuencia impulsados por el Ministerio del Interior han tenido resultados especialmente positivos, a juicio de Jorge Fernández Díaz, como el denominado plan ROCA para evitar los robos en explotaciones agrícolas y ganaderas, que ha permitido un descenso del 27 por ciento de estos delitos desde 2013, al pasar de 21.146 infracciones en ese año a 17.602 en el transcurso de 2015.

Respecto al programa contra el robo en viviendas, el ministro del Interior en funciones cifra en un 10 por ciento la disminución de estos delitos desde 2012, cuando hubo 133.750 frente a los 119.067 del año pasado.

Fernández Díaz anunció próximos balances de delitos de odio y criminalidad organizada.

Este último incluirá datos sobre las operaciones contra la corrupción llevadas a cabo por la Guardia Civil y la Policía Nacional, que han abierto en la pasada legislatura actuaciones que "no tienen parangón" con las efectuadas en anteriores periodos legislativos.

Ha reconocido el repunte de este tipo de delitos "muy graves", pero considera "esperanzador" la labor de los agentes para garantizar el funcionamiento del estado de Derecho y el combate de las fuerzas de seguridad que actúan con independencia del color político de los implicados en los casos de corrupción y otros delitos relacionados, como el blanqueo de capitales.

Al mismo tiempo, el hasta ahora responsable de Interior quiso resaltar las medias aprobadas a iniciativa del PP en la pasada legislatura que, a su juicio, "harán más difícil caer en la tentación de la corrupción".

Con todo, Jorge Fernández Díaz quiso dejar claro que en estos últimos cuatro años España es, "sin ningún género de dudas, un país más seguro" y que los ciudadanos independientemente de su nivel económico y situación personal pueden disfrutar mejor de este derecho fundamental. Añadió que esta ha sido la primera legislatura de la democracia en la que no hubo atentados terroristas.