Agentes de la Policía Nacional han detenido en Murcia a tres mujeres francesas de entre 28 y 36 años que vivían en Torrevieja (Alicante) y se desplazaban a Murcia, donde cometieron al menos catorce robos, informó hoy este cuerpo.

Las detenciones ocurrieron la pasada tarde, después de que un vecino de la calle Mar Menor de Murcia observase a través de la mirilla de su vivienda cómo las tres mujeres trataban de forzar con diversas herramientas la puerta de un inmueble adyacente.

Agentes de la Unidad de Prevención y Reacción acudieron y mientras unos ascendían por las escaleras al domicilio, otros quedaron en el rellano del edificio.

Momentos después de escuchar un ruido en el patio de luces de la finca, los agentes observaron cómo tres mujeres salían del ascensor, siendo en un principio interceptadas.

Los policías vieron que el bombín y el marco de la vivienda se encontraban fracturados y en el patio de luces había un cincel y un destornillador.

En las cercanías al lugar de los hechos fue localizado un vehículo con matrícula extranjera, en el que, tras una inspección exterior, hallaron oculto en uno de los amortiguadores una llave magnética con la que se pudo registrar el interior del coche.

En el vehículo fue hallado un documento de alquiler de una vivienda en Torrevieja (Alicante) a nombre de una de las detenidas y un doble fondo en el maletero.

Consultadas las autoridades francesas, a las tres detenidas les constan numerosos antecedentes en su país, concretamente a una de ellas 39 detenciones por robo con fuerza, deduciéndose que las tres detenidas se dedican de forma habitual e itinerante al robo con fuerza en viviendas, desplazándose desde la zona costera hasta las ciudades de interior para aprovechando la ausencia de los inquilinos por ser época estival con objeto de delinquir.

A las tres detenidas se les ha imputado un total catorce robos con fuerza en domicilio, ya que el modus operandi empleado y los vestigios de las inspecciones oculares llevadas a cabo en los mismos arrojan una misma autoría.

La operación ha sido llevada a cabo por agentes de la Comisaría de Distrito de San Andrés, junto con la Unidad de Prevención y Reacción de la Jefatura Superior de Policía de Murcia.