Las fuerzas de seguridad han comprobado que en el avión siniestrado ayer en los Alpes viajaban 51 españoles, 55 alemanes y el resto de otras 14 nacionalidades.

Así lo han manifestado fuentes de la investigación, que han señalado que todavía quedan quince pasajeros de los que se desconoce su país de origen.

Según los últimos datos del equipo policial que está trabajando para recabar información que permita conocer las nacionalidades e identidad de las personas que viajaban en el Airbus A320, de los 144 pasajeros (a los que habría que sumar 6 tripulantes), 51 tenían nacionalidad española.

Las mismas fuentes han señalado que, a falta de la identificación final, 55 pasajeros eran alemanes, uno tenía la doble nacionalidad alemana y japonesa y otros dos, alemana y kazaja.

También viajaban en el vuelo fletado por la compañía Germanwings, que hacía el trayecto Barcelona-Düsseldorf, dos argentinos, dos australianos, un belga, dos colombianos, un danés, tres estadounidenses, un holandés, dos iraníes, un israelí, un marroquí, un mexicano, un británico y dos venezolanos.

De un total de quince pasajeros se desconoce todavía la nacionalidad.

Tras la segunda reunión del gabinete de crisis constituido por el Gobierno, éste ha confirmado que había sido identificados 49 ciudadanos españoles, aunque ha indicado que la cifra era provisional, si bien en cualquier caso sería muy cercana a la definitiva.

Desde Fráncfort (Alemania), el presidente de la aerolínea Germanwings, Thomas Winkelmann, había dicho esta mañana que de los 150 pasajeros a bordo del A320 siniestrado 72 eran de nacionalidad alemana y 35 españoles.