La Audiencia de Las Palmas ha condenado a 1 año y 10 meses de prisión a un monitor de 24 años que sometió a abusos sexuales a un niño de 10 en un campamento de verano tras rebajar la fiscalía hoy una petición inicial de 4 años y 4 meses de cárcel de acuerdo con la representación del procesado.

Este dio su conformidad a la acordada pena de un año y diez meses de cárcel, que se le han impuesto por dos delitos diferentes, uno de abuso sexual por el que le han condenado a un año y seis meses de reclusión y otro de tenencia de pornografía infantil por el que le han sumado cuatro meses más, en la vista oral del juicio iniciado por los hechos referidos, ocurridos el 3 de julio de 2013.

En la noche de ese día, el ahora condenado, Julián Aguirre Estupiñán, "se metió en la cama en la que dormía el alumno asistente a dicho campamento" al que hizo objeto de sus abusos y le sometió a tocamientos y otras prácticas sexuales hasta que fue sorprendido por la presidenta de la entidad que organizaba la actividad, un club de judo, según el relato del fiscal, que ha ratificado el acusado.

Este ha dado su conformidad también a la reclamación de pagar al niño una indemnización por daños morales de 18.000 euros, cuya cuantía ha quedado fijada después de que la fiscalía aceptara también rebajarla respecto a su petición inicial, de 30.000 euros, al negociar un acuerdo con la defensa del responsable de los abusos y con los abogados del club para el que trabajaba y su aseguradora.

Ya que la asociación que organizó el campamento ha tomado parte en el juicio como responsable civil subsidiaria de lo ocurrido y tenía contratado un seguro, por lo que tendría que hacerse cargo del pago de la indemnización en caso de no poder hacerlo el monitor por insolvencia.

La abogada del procesado, Pilar Alonso, ha declarado, de cualquier modo, que es propósito de su representado abonar él los 18.000 euros aunque de forma aplazada, al no poder afrontar el pago de una cantidad así de una sola vez.

Además, ha anunciado que pedirá la suspensión de la condena del joven, al ser esta de menos de dos años, carecer de antecedentes penales el acusado y haber pasado este ya un año y cuatro meses en la prisión provisional en la cárcel, a la que la letrada ha dicho que espera que no tenga que volver, por todo lo expuesto.

La detención de Julián Aguirre Estupiñán se produjo el 26 de julio de 2013, después de que un día antes relatara lo ocurrido en el campamento de verano de forma voluntaria a un psicólogo y no se opusiera a que este se dispusiera a denunciar los hechos a la policía.

Ya que el acusado había comenzado a acudir al psicólogo el 23 de julio con el propósito de lograr evitar o controlar su atracción sexual hacia los niños, según se exponía en el escrito de conclusiones provisionales de la fiscalía.

En el cual se detalla que también se le intervino un ordenador en su domicilio que, según él mismo reconoció, había utilizado para satisfacer sus deseos libidinosos y descargar imágenes de menores de edad con contenido sexual, en archivos obtenidos de diferentes páginas de internet.