El hombre acusado de matar a su exsuegra en La Guancha con un palo en junio del 2010, Ramón Armas de León, fue condenado a 20 años de prisión como autor de los delitos de asesinato y allanamiento de morada.

La Sección VI de la Audiencia Provincial de Santa Cruz de Tenerife ya emitió la sentencia sobre este caso, que fue juzgado con Tribunal de Jurado entre el 17 y el 20 de noviembre pasado. La magistrada Esmeralda Casado, que ejerció de presidenta del Tribunal, dictó la sentencia y esta fue remitida a las partes esta misma semana.

Ramón Armas de León consumió alcohol y cocaína en las horas previas a los hechos, coincidiendo con la celebración de las fiestas de El Pinalete. Meses antes, una denuncia de su expareja provocó que un juez le aplicara una orden de alejamiento.

La víctima de los malos tratos de Ramón se hallaba esa noche en un viaje a una de las islas con un grupo de catequistas. Pero el ahora condenado no lo sabía. Y decidió acudir al que fue su domicilio conyugal con la clara intención de acabar con su vida. Utilizó un palo para causar diferentes daños en dos coches y en varias dependencias de la vivienda. Al no hallar a su exesposa, acudió hasta el dormitorio de su exsuegra, Onelia González Pérez, de 78 años, que no podía caminar y padecía problemas de oído. Ramón Armas le propinó un único golpe con el palo en la cabeza, que fue suficiente para acabar con su vida.

Armas de León se mostró en el juicio como una persona polémica y agresiva, principalmente en la primera sesión y tras la lectura del veredicto que determinó su culpabilidad. De hecho, tuvo que ser desalojado, puesto que cuando la fiscal delegada de violencia de género, Francisca Sánchez, expresaba su solicitud de condena de 20 años por asesinato, el procesado gritó: "20 no, 40".

No fue el único incidente curioso protagonizado por el acusado. El primer día del juicio, solicitó un aplazamiento de la vista oral, puesto que consideraba que su abogado lo había engañado y se sentía indefenso. Sin embargo, la magistrada negó tal extremo y le aseguró que el letrado defensor había efectuado una buena labor y que ella velaría por evitar su indefensión.

Ramón Armas de León deberá pasar 16 años de prisión, puesto que ya lleva más de cuatro en el centro Tenerife II, concretamente desde finales de junio del año 2010.