Diego Alberto P.P., acusado de abusar de una menor en 2009, ha negado en el juicio que ha celebrado en la Audiencia de Madrid los delitos que se le imputan y que chantajeara a la chica con vídeos que obtuvo sin su consentimiento.

El procesado, de nacionalidad peruana, se le imputan los delitos de agresión sexual, amenazas graves y coacciones continuadas. La Fiscalía de Madrid ha solicitado que se le condene a un total de 21 años de cárcel, mientras que su defensa ha reclamado la libre absolución.

Según la versión del acusado, conoció a la víctima en el verano de 2009 a través de la red social Tuenti. En septiembre de ese año, acordaron una cita en Alpedrete en la que ambos decidieron mantener relaciones sexuales consentidas.

"Ella me decía que me quería", ha aseverado el procesado, quien ha negado que la grabara unos vídeos para amenazarla con publicarlos en la citada red social.

Frente a este testimonio, la menor ha relatado oculta tras un biombo que el día que quedaron en la estación de Alpedrete éste le sugirió que se fueran a un descampado próximo. Fue en ese lugar donde comenzó a realizarla tocamientos en contra de su voluntad, sintiéndose ésta "incómoda" con la situación. "Estaba paralizada", ha confesado.

Tras pasar en este lugar cerca de 3 horas, el chico dejó a la menor vestirse y se fueron. Semanas después, llamó a la menor para volverla a ver, a lo que ésta se negó. Sin embargo, le recordó que tenía varias grabaciones suyas.

A pesar de ello, la joven contó a una amiga lo sucedido y ésta le comentó que se lo dijera a su tutora. A su vez, ésta le propuso acudir a una psicóloga para que pudiera afrontar mejor esta situación.

"Dejé de salir a la calle y me encerraba todos los días en mi cuarto para llorar. Un día exploté y se lo conté a una amiga", ha relatado la joven.