La Policía Local de La Laguna detuvo a un hombre de 45 años como supuesto autor de los delitos de violencia de género y doméstica en El Cardonal. Su esposa aseguró que lleva sufriendo episodios de maltrato durante 18 años y dicha conducta también la han padecido tres hijos menores.

El servicio fue realizado por el Grupo de Ayuda y Respuesta ante el Abuso (GARA) el martes. El varón, natural de Valencia, actuó con el agravante de ejercer la violencia en presencia de los niños, de 13, 6 y 3 años, que también han padecido malos tratos físicos y psicológicos.

El individuo cumplió una orden de alejamiento respecto al mayor de sus hijos, en base a una condena del Juzgado de lo Penal de 2008 por malos tratos físicos. El motivo fue que agredió al menor a la salida del colegio. El altercado fue presenciado por otros padres y niños. El suceso fue denunciado por el director del colegio.

Los policías actuaron el martes por una denuncia basada en el maltrato psicológico, las continuas vejaciones, los insultos y las amenazas de muerte hacia su esposa y madre de los citados hijos.

La mujer, junto a los tres menores, fue derivada hacia un centro de acogida para garantizar su protección, tras la activación del Dispositivo de Emergencias de Mujeres Agredidas (DEMA) por parte de funcionarios.

El acusado, que declinó prestar declaración ante la Policía, cuenta con cuatro antecedentes en su historia policial. Su primera detención tuvo lugar en 1989 por un caso de lesiones. Posteriormente, fue apresado tras estar reclamado por la autoridad judicial. En 1994 se le atribuyó un delito de tráfico de drogas, mientras que hace cuatro años se le acusó de malos tratos en el ámbito familiar. El episodio último que desencadenó su detención el pasado martes fue que cortó la luz y el agua de la vivienda porque su mujer se negó a mantener relaciones sexuales con él, tras llegar borracho a su casa. Después, la advirtió de que mataría a su madre, a los hijos y, por último, a ella. El Juzgado de Instrucción Número Tres aprobó una orden de alejamiento para el agresor, que lo obliga a no aproximarse a su esposa durante 16 meses.

Además, dicho órgano judicial aprobó un régimen vigilado de visitas a los menores por parte del ahora detenido.