Técnicos del Instituto Nacional de Toxicología analizan las muestras óseas de un bebé, exhumado el pasado lunes en el cementerio de Montjuïc de Barcelona, en busca de restos para determinar su perfil genético y cotejarlo con el de una mujer que denunció que le robaron a su hijo cuando nació.

Según han informado fuentes judiciales, el lunes pasado se realizó en el cementerio barcelonés la primera exhumación ordenada por la Fiscalía en el marco de la investigación abierta sobre una presunta trama de bebés robados, a la que asistió la madre que denunció el caso.

Esta exhumación fue ordenada por la Fiscalía de Barcelona a petición de la de Madrid, ante la cual la mujer denunció que había dado a luz un bebé muerto en la capital catalana en 1982, pero sospecha que, en realidad, el niño le había sido arrebatado y entregado a otros padres, por lo que, si sus sospechas son ciertas, el bebé enterrado en la capital catalana no sería su hijo.

La exhumación ha confirmado que en el interior del féretro hay restos de un bebé recién nacido, pero falta por determinar si se trata del hijo de la denunciante, a la que los técnicos del Instituto Nacional de Toxicología extrajeron también el pasado lunes muestras de ADN.

Dado los años transcurridos, en el interior del ataúd enterrado no se han encontrado restos biológicos, como cabellos, por lo que los forenses recogieron muestras de material óseo en el que ahora tratan de encontrar elementos que permitan determinar el perfil genético del bebé.

Mientras los restos biológicos contienen suficiente ADN para ser analizados, no ocurre así con los óseos, por lo que no es seguro que se pueda determinar el perfil genético del bebé enterrado a partir de esas muestras.

Una vez efectuado su análisis, el Instituto de Toxicología enviará los resultados a la Fiscalía de Madrid, que investiga la supuesta trama de los bebés robados, que ha motivado ya la presentación de cerca de 200 denuncias en toda España.

El fiscal de Barcelona Miguel Ángel Aguilar, que investiga más de un centenar de denuncias por presuntos bebés robados en la provincia, ha recibido ya la mitad de los expedientes médicos que solicitó al Departamento de Salud para comprobar si hay indicios delictivos tras esos casos, según han informado fuentes judiciales.

Una vez disponga de toda la documentación, el fiscal decidirá si es necesario ordenar alguna exhumación o alguna otra diligencia para averiguar si las denuncias tienen base.

En la gran mayoría de casos investigados, sin embargo, no es posible disponer de restos para identificar a los bebés, dado que habitualmente los recién nacidos fallecidos eran enterrados en fosas comunes.