> La Policía Nacional ha desarticulado una banda de narcotraficantes que ofrecía sus servicios a otras bandas para importar cocaína a España. Los arrestados, entre los que se encuentran un policía local de Torrejón de Ardoz (Madrid), rompían los cerrojos de contenedores con mercancía legal en los puertos de origen, introducían la droga y después colocaban otros sistemas de cierre. Las detenciones se produjeron cuando la Policía tuvo conocimiento de que la banda iba a traer droga a España desde Sudamérica oculta en un cargamento de gambas congeladas.

La Policía Nacional ha desarticulado una banda de narcotraficantes que traían cocaína de Sudamérica camuflada entre gambas congeladas y de la que formaba parte un policía local del municipio madrileño de Torrejón de Ardoz (Madrid), que tenía como misión dentro del grupo garantizar la seguridad de los miembros.

La organización estaba formada íntegramente por españoles y se asentaba en Madrid, Alcalá de Henares y Torrejón de Ardoz. La banda ofrecía sus servicios a narcotraficantes sudamericanos, a los que proporcionaba varias vías de entrada a través de los puertos de Marín (Pontevedra) y Algeciras (Cádiz) para introducir la cocaína en España. Su base de operaciones era un locutorio que servía como lugar de reuniones y donde entregaban también la sustancia estupefaciente a las bandas que los habían ''subcontratado''.

Los narcotraficantes empleaban el método del ''gancho ciego'' para introducir la droga en España. Esta modalidad consiste en fracturar los precintos de contenedores en los puertos de origen, introducir el estupefaciente en su interior y sustituir los elementos de cierre por otros nuevos.

La investigación sobre este grupo se había iniciado en 2009, cuando los agentes lograron identificar a los integrantes del grupo. Las pesquisas permitieron comprobar que cada uno de los miembros del grupo tenía una función delimitada, además de que un policía local de Torrejón de Ardoz (Madrid) formaba parte de la banda y se encargaba de garantizar la seguridad de los miembros del grupo y asegurarse de que no fueran capturados. Este agente era además el enlace con los traficantes colombianos en España y el encargado de facilitar las diferentes vías de entrada de los contenedores.

CITA EN EL LOCUTORIO

En un momento dado, la Policía averiguó que la banda iba a recibir un cargamento que llegaría al Puerto de Marín (Pontevedra). Los agentes comprobaron que la organización ultimaba los preparativos para hacerse con la droga y distribuirla, y que el punto de entrega del estupefaciente sería en las inmediaciones del locutorio. Allí, la banda comprobaría la calidad de la mercancía antes de entregársela a los responsables de la organización.

Una vez recaba toda la información, la Policía se desplegó en las inmediaciones del local y en los domicilios de los implicados. La operación culminó con el arresto de ocho personas, además de la incautación de 50 kilos de cocaína, 150.000 euros en efectivo, tres pistolas, seis vehículos, teléfonos móviles y abundante documentación.

La operación, que continúa abierta, ha sido realizada por agentes de la Brigada Central de Estupefacientes de la Comisaría General de Policía Judicial, que han contado con la colaboración del Grupo de Respuesta Especial al Crimen Organizado (GRECO) de Galicia, de la Comisaría de Alcalá de Henares y de la agencia Tributaria. Además han contado con el apoyo de la Comisaría de Policía Local de Torrejón de Ardoz y de la Consejería de Seguridad del ayuntamiento de la localidad.