La Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Santa Cruz de Tenerife condenó a Juan José L.L., de 37 años y natural de Los Realejos, a un año de prisión por un delito de Incendio Forestal al intentar propagar el incendio de junio de 2007 en el Norte de Tenerife. Además, el acusado no podrá acudir al lugar de los hechos durante dos años.

Los hechos ocurrieron el 30 de junio, fecha en la que se inició un incendio forestal en la zona de los Campeches, en Los Realejos, que se extendió a otros términos norteños y que afectó a varios espacios naturales protegidos como el Parque de la Corona y el Teide. Este incendió llegó a damnificar 19.000 hectáreas de monte.

La sentencia señala, como hechos probados, que el procesado, que fue contratado en el mes de junio por la entidad mercantil Transformación Agraria, S.A. (TRAGSA) como auxiliar de incendios, acudió en la tarde del 30 de junio, junto a otros trabajadores de la citada empresa, a colaborar en la extinción de las llamas.

Juan José L.L., siguiendo instrucciones del jefe de la cuadrilla, se situó en un cortafuegos realizado por la Brigada contraincendios ubicado en una zona próximo al incendio y cercano a El Colmenar, dentro del Parque Nacional del Teide, con la misión de vigilar y, llegado el caso, detener la marcha del fuego y evitar que éste se extendiera monte abajo, hacia La Orotava.

Fue sorprendido

Según el texto judicial, sobre las 20:00 horas, el acusado, "con el ánimo de quemar el monte que aún no se había visto afectado por las llamas", abandonó sigilosamente su puesto de vigilancia, cruzó el cortafuegos y se adentró en el área quemada, dónde cogió un palo del suelo que aún estaba ardiendo.

El procesado volvió a su puesto con la "antorcha" y prendió fuego a un pequeño arbusto. Esta acción fue advertida por una compañera, quien le gritó alertando a los demás. Al ser descubierto, Juan José procedió rápidamente a sofocar las llamas que había provocado. Gracias a la trabajadora, las llamas no llegaron a propagarse a otras zonas.

Juan José L.L. reconoció los hechos y aceptó la petición de un año de prisión, sin intención de recurrir el fallo.

La Audiencia Provincial también ha condenado al acusado a la inhabilitación especial para el empleo, profesión u oficio que guarde relación con labores de extinción de incendios durante el tiempo de la condena, una pena que será comunicada a los organismos pertinentes. El condenado también tendrá que indemnizar al Ayuntamiento de Los Realejos.