La Policía Nacional intervino durante la jornada de ayer herramientas y otros objetos de la vivienda que el acusado del asesinato de Isabel Canino Rivero posee en la vivienda donde apareció el cadáver de la joven conductora de Titsa. La actuación se prolongó durante casi cuatro horas y los agentes precintaron varias dependencias de la casa numero 80 del Camino de la Hornera, en La Laguna.

El registro del ya tristemente famoso edificio comenzó poco después de las 10:00 horas de la mañana de ayer, según indicaron fuentes vecinales.

Hasta ese tramo del Camino de la Hornera acudieron diferentes vehículos radiopatrulla del Cuerpo Nacional de Policía y coches camuflados de la Brigada de Policía Judicial, por lo que la vía fue cortada al tráfico.

Poco antes de las 10:30 horas, Salvador Morales Méndez entró en la vivienda esposado y vestido con un chándal, según uno de los testigos. En la nueva inspección ocular e intervención de posibles elementos probatorios estuvieron miembros del Grupo de Homicidios de la Policía Nacional, la Policía Científica y el secretario del Juzgado número 4 de La Laguna.

Los funcionarios policiales contaron con el apoyo de personal del Ayuntamiento de La Laguna que ya participó en las excavaciones desarrolladas con anterioridad en el exterior y el interior de la casa.

De hecho, para los trabajos de ayer fue necesaria la utilización de picos y palas para el movimiento del pavimento de la planta baja de la vivienda.

Una de las fuentes consultadas por EL DÍA aseguró que, mientras duró la inspección, Salvador Morales Méndez mantuvo una gran serenidad, que ya parece habitual en el comportamiento del citado individuo ante las fuerzas de seguridad.

Los profesionales del Grupo de Homicidios recogieron herramientas que supuestamente ha usado el imputado para realizar diferentes trabajos de albañilería en su propiedad.

Además, también se intervinieron losetas del pavimento bajo el que se encontraba la arqueta donde aparecieron los restos de Isabel Canino Rivero. Otras fuentes señalaron que, por ahora, no ha aparecido el ordenador portátil propiedad de la mujer asesinada; un equipo informático que puede contribuir a aportar datos muy esclarecedores.

Fuentes oficiales indicaron que la excarcelación del imputado para estar presente en el registro es un proceso habitual utilizado por la autoridad judicial en este tipo de registros rutinarios para reforzar el informe de la investigación.