Miembros de la Policía Local de Arona precintaron durante la mañana de ayer dos terrazas sobre el mar en el muelle de Las Galletas, después de que la superficie de una de ellas cediera y estuviera a punto de caer al agua cuando 40 clientes estaban cenando en su interior.

Al parecer, los hechos ocurrieron a las 20:30 horas del pasado domingo. Un grupo de personas de la tercera edad del citado pueblo costero se hallaba sentado en las mesas colocadas sobre la citada plataforma del establecimiento.

Tras detectar el problema y observar la inclinación de la terraza, los mayores fueron evacuados para evitar que cayeran al agua. Supuestamente, cada uno de los soportes afectados está fijado al hormigón del puerto con una plancha de hierro y cuatro tornillos, según una de las fuentes consultadas por EL DÍA a primeras horas de la tarde.

Supuestamente, dicho sistema de sujeción no resultó eficaz para soportar una estructura de dichas características, aunque serán los técnicos del Ayuntamiento de Arona quienes determinen las causas exactas del incidente e informen de las actuaciones a llevar a cabo a partir de ahora, así como la fecha de reapertura del local.

En cualquier caso, otra de las personas consultadas señaló que en estos casos es mejor que los pilares estén fijados dentro del propio hormigón.

Y es que, en determinadas situaciones, el salitre puede deteriorar seriamente las bases metálicas.

Lo cierto es que faltó muy poco para que el incidente se convirtiera en un suceso trágico en el recinto portuario, cuya explotación se adjudicó hace años a una empresa privada por parte de la administración competente.