Nuestro hogar es el lugar donde mejor y más confortables debemos sentirnos, e invertimos mucho tiempo y dinero en lograr que el ambiente se parezca a lo que deseamos. Uno de los elementos que ha logrado acomodar nuestro estilo de vida es, sin duda, la presencia de los dispensadores de agua mineral en las casas.

Los dispensadores de agua se han convertido en uno de los útiles domésticos que más ha aumentado en ventas en nuestro país, y su auge se debe, sobre todo, a la capacidad de facilitarnos la vida y evitar el engorro de tener que cargar con el peso de las garrafas o botellas de agua mineral.

A pesar de que sus comienzos fueron básicamente para cubrir las necesidades de las empresas y oficinas, no es menos cierto que se ha colado en muchos hogares para proveer a sus usuarios de un servicio de agua potable y mineral de mayor calidad que la del agua de abasto. Con tan solo apretar una palanca o pulsar un botón, podrás disponer de agua fría o natural, o incluso mezclar ambas si lo deseamos.

Su principal utilidad radica, no solo en evitarnos cargar pesos innecesarios, sino que también nos proporciona un agua de calidad, gracias a los filtros interiores de los que disponen, y que nos permite disfrutar del agua a diferente temperatura. Ya sea en verano, cuando nos apetece tomarnos un vaso de agua fresca y no tendremos que enfriar la previamente en la nevera, que además ocupa espacio en el frigorífico. Así también, en invierno podremos prepararnos una infusión al instante, sin tener que calentar previamente el agua.

Para comprar un dispensador de agua, vamos a tener en cuenta una serie de consideraciones que vamos a ver a continuación y que nos ayudarán a elegir el dispensador de agua que más se a adapte a nuestras necesidades. De hecho, podemos diferenciarlas en tres tipos diferentes de dispensadores de agua.

Primero, en función de la temperatura del agua que pueden alcanzar, el dispensador de agua tendrá dos salidas: una para el agua caliente y otra para el agua fría, o a temperatura ambiente.

En todo caso, también podemos diferenciarlos por el nivel de enfriamiento que queramos. Si es esta la situación, tenemos otros dos tipos de dispensadores de agua: los que tienen un enfriamiento similar al de un refrigerador, y el electrónico, que es un sistema más avanzado.

También tenemos que tener en cuenta las necesidades de consumo de nuestro entorno. ¿Es lo mismo un dispensador para una vivienda que para una oficina? Pues dependerá del número de usuarios. En casa influyen los factores de espacio, número de personas que cohabitan en ella o el consumo medio de agua por persona/día.

Sin embargo, en una oficina tendremos en cuenta el número de empleados y las horas que trabajan cada día; si hace mucho calor o no, y también tendremos en cuenta el espacio del que disponemos.

Teniendo en cuenta estos factores, podremos elegir mejor el dispensador de agua que queremos comprar y disfrutar de la comodidad de su uso.