Educación y reciclaje, no parecen dos términos que a primera vista tengan una estrecha conexión, sin embargo, sí que están conectados en su esencia.
En el mundo actual, donde las tecnologías han adquirido un relevancia tal, que condicionan prácticamente todos los ámbitos de la vida, es importante ponerle restricciones y controlar su impacto en diferentes aspectos. El mundo industrializado y globalizado de hoy, presenta muchas ventajas en numerosos frentes con respecto al de épocas pasadas, pero estos cambios para mejor han conllevado también unas consecuencias negativas, algunas tan perjudiciales que hay quienes no ven rentables esos avances industriales teniendo en cuenta las consecuencias que conllevan.
El principal perjudicado de todo este sistema no es otro que el medio ambiente. En numerosos aspectos de la naturaleza se observan los perjuicios que produce ese sistema de vida actual. Son muchas las organizaciones que denuncian la falta de consideración y el ‘olvido’ del conglomerado industrial y de los estamentos políticos de cada país con el ecosistema natural, el cual sufre continuos deteriores derivados de esos avances industriales que movilizan el mundo. Esta posición defiende que hay que tomar medidas que restrinjan el avance de la tecnología, pues que cada paso adelante de ésta, supone dos atrás de la naturaleza.
Desde hace ya algunos años en España se tomó conciencia de que el reciclaje de basuras no era un derecho, sino un deber para los ciudadanos si quería cuidarse la naturaleza del país. Como opina Oscar Martin, consejero delegado de Ecoembes “El compromiso con el medio ambiente no es opcional”. La población respondió receptivamente a las campañas y los avisos que se lanzaron desde distintas organizaciones y desde los máximos mandatarios. Desde entonces, se implantó la idea de que el reciclaje era fundamental para cuidar tanto el territorio español como el planeta entero. Gestos como separar residuos orgánicos de plásticos, el vidrio del cartón y los papeles, etc. O elementos como la unidad móvil de Ecoembes, han sido fundamentales. Esta tónica ha ido bien pero hay que mantenerla, por eso es tan importante el papel de la educación en el reciclaje. Los jóvenes de ahora, que serán mayores en el futuro, deben interiorizar estas claves desde pequeños puesto que así lo tomarán como un hábito y el día de mañana seguirán transmitiendo esa importancia que tiene el reciclaje para el mundo.