Las altas temperaturas de los alimentos causan inflamación constante en el esófago y lesiones físicas en la mucosa. Además, afecta las células, lo cual es un factor de riesgo para la aparición de cáncer, según William Otero, profesor de la Unidad de Gastroenterología de la Universidad Nacional de Colombia.

El doctor Otero explicó que al momento de ingerir y percibir los alimentos y bebidas como calientes, las personas los tragan y dejan de sentir molestia. Sin embargo, estos son conducidos al esófago, el cual resulta afectado por las altas temperaturas, lo que produce un daño recurrente en la mucosa. En el proceso por el cual este órgano trata de defenderse aumenta la replicación de células, lo que se conoce como proliferación celular.

Las altas temperaturas pueden dañar el material genético de las células que están reparándose y aunque el mecanismo final no se conoce con exactitud, se sabe que la inflamación constante en esta zona del cuerpo puede generar un tumor.

La recomendación médica es no consumir alimentos calientes, porque en el esófago pueden aparecer úlceras y llagas, tal como ocurre en la boca, informa la agencia de noticias de la Universidad de Colombia.

Al respecto, el gastroenterólogo resalta que en la aparición de este tipo de cáncer influyen factores de riesgo como la predisposición genética, la obesidad y el consumo de tabaco y bebidas alcohólicas.

"Existen dos tipos de cáncer de esófago, el escamocelular y el adenocarcinoma. Los primeros síntomas son la dificultad para tragar y el atoramiento con alimentos sólidos. No a todo el que come caliente le dará cáncer, pero es un factor de riesgo y eso está demostrado", agregó el doctor Otero.

Al principio, a las personas se les dificulta pasar alimentos gruesos y en la medida en que el tumor va creciendo se ven impedidos para tragar alimentos blandos e incluso líquidos. También, produce falta de apetito, pérdida de peso y vómito de sangre.

Si el cáncer es detectado a tiempo puede tratarse con radioterapias, si es identificado en una fase avanzada puede ser mortal al hacer metástasis en los ganglios del cuello y los pulmones.

Por esto, lo recomendable es mantener una vida saludable y ante el menor síntoma de atoramiento o complicaciones para tragar dirigirse al gastroenterólogo.