Tres científicos han descubierto cómo los vientos forman las dunas de arena en Marte, comparando los patrones con los modelos de viento en dunas de la península de Magilligan, Irlanda del Norte.

La resolución de los datos del instrumento HiRISE a bordo de la nave MRO de la NASA es tan detallada que el equipo pudo ver las ondas individuales en la arena en Marte a 225 millones de kilómetros de la Tierra.

La modelización del flujo de viento en 3D en un entorno terrestre permitió a los científicos, por primera vez, ver cómo grandes dunas en Marte modifican el flujo de viento local.

Los resultados son importantes, no sólo para entender la evolución de las dunas de arena en Marte, sino también para aprender cómo el viento puede soplar cuando una nave espacial trate de aterrizar en el planeta rojo, o cuando los fuertes vientos puedan golpear a los rovers de investigación.

Mary Bourke, profesora de Geografía del Trinity College en Londres, colaboró con el profesor Derek Jackson de la Universidad de Ulster y Thomas Smyth en la Universidad Flinders para hacer los descubrimientos. Los hallazgos del equipo se acaban de publicar en la revista Nature Communications.

Bourke dijo: "Siempre me he preguntado en qué dirección sopla el viento en Marte. Por supuesto no tenemos estaciones meteorológicas establecidas allí para ayudarme a responder a esa pregunta, por lo que previamente hemos tenido que usar la forma de dunas de arena para calcular la dirección de alargamiento de las vetas de arena para mapear el flujo del viento, pero se perdían gran parte de los detalles".

Ahora, --explicó-- hemos trabajado con los datos de la región del cráter Proctor en las tierras altas del sur de Marte, para descubrir que las ondas en las dunas se movían alrededor de 1,5 metros por año. Esta es una idea mucho más precisa que la que teníamos antes para considerar cómo han evolucionado las formas de relieve marciano, y cómo van a evolucionar cuando estructuras como naves espaciales sean afectadas en el futuro.

Los resultados de los científicos mostraron que el pensamiento establecido utilizando modelos de circulación global del aire a gran escala es demasiado grueso para la comprensión de cómo se mueven los vientos de arena en las superficies más complejas de Marte, por ejemplo, sobre las dunas de arena).

En su sitio de estudio, una formación de dunas en la Península de Magilligan, en Irlanda del Norte, los científicos fueron capaces de identificar la dirección de los vientos que son probablemente responsables de transportar la arena a través de las superficies de dunas, tal y como apuntan los datos obtenidos del planeta rojo.