El calzado con tiras y los botines de puntera abierta marcarán las tendencias para la temporada otoño-invierno de 2016/2017 en los componentes del calzado, que se muestran hoy y mañana en la 34ª edición de Futurmoda, que tiene lugar en la Institución Ferial Alicantina (IFA), en Elche.
Esta edición del Salón Internacional de la Piel, los Componentes y la Maquinaria para el Calzado y la Marroquinería da a conocer conceptos e ideas creativas con nuevos colores, materiales, texturas, adornos, fornituras, diseños y construcciones de calzado, bolsos, ''looks'' y complementos de moda con vistas al otoño-invierno del próximo año.
Entre las formas y materiales de la nueva temporada destaca el calzado con tira en T gruesa, el Oxford artesanal y con tacón medio, el zapato de salón de plataforma o la bota Wellington con tacón, según han indicado fuentes de la Asociación Española de Componentes del Calzado (AEC).
Predominarán los botines con puntera abierta, la bota victoriana, la bota de trabajo y también la encorsetada a la rodilla.
En los modelos "casual" y deportivo, se apuesta por los "tenis técnicos", la bota de senderismo y el calzado de alto impacto.
Respecto a los colores para calzados y accesorios, se extienden desde neutros en blanco grisáceo y cremoso hasta tonos profundos, casi negros.
El rojo salón y el marrón borgoña son los "nuevos tonos sangre" de la referida temporada, a la vez que sobresalen el verde zarza y el azul intenso, según las mismas fuentes.
También adquieren importancia los textiles como terciopelos decorativos, brocados dorados y embellecimientos incrustados.
La trigésimo cuarta edición de Futurmoda cuenta con un total de 208 firmas expositoras, un 40 % más respecto a convocatorias anteriores, lo que ha motivado que la feria más importante en España de la industria de los componentes para el calzado haya colgado el "cartel de completo" por primera vez en su historia, según fuentes de la organización.
El director general de la AEC, Álvaro Sánchez, ha pronosticado que "Futurmoda seguirá creciendo", ya que el sector -que cuenta con 1.000 empresas y emplea a 11.000 trabajadores- "vive un momento dulce".
La industria de los componentes del calzado ha crecido un 12 % en el primer semestre del año y, aunque las exportaciones continúan siendo muy importantes, sobre todo a Francia, Reino Unido, Alemania, Italia, norte de África, EEUU, Asia y a los países del Este, "el hecho de que se está volviendo a fabricar zapatos en España es, en buena medida, responsable del crecimiento", según el sector.