El presidente de la Federación Española de Donantes de Sangre, Martín Manceñido Fuertes, manifestó ayer que "en ningún caso es justificable discriminar a nadie por su orientación sexual y sí por las posibles prácticas de riesgo sin más consideración".

De esta manera, los donantes se muestran contrarios al dictamen del Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE), que ha justificado la prohibición de donar sangre a los hombres que han tenido relaciones sexuales con otros hombres, vigente en algunos Estados miembros como Francia.

Manceñido, que se encontraba en Ámsterdam para asistir a la Asamblea Anual de la Federación Internacional de Donantes de Sangre, afirmó que en el colectivo de los donantes lo que prima es la responsabilidad y la búsqueda de la seguridad transfusional.

La asamblea internacional elaborará hoy un documento dirigido al Parlamento Europeo, a propuesta de España, para que se fije un criterio para toda la UE como el que existe en la legislación española, "sin duda la más racional y coherente en este como en otros asuntos en la materia".

Asimismo, Manceñido recordó que la Eurocámara acaba de aceptar a trámite otra propuesta presentada por los donantes españoles, y que hoy será asumida por todas las Federaciones Nacionales de Donantes de Sangre europeas, sobre la urgente necesidad de disponer de una normativa que posibilite la obtención de plasma para elaborar medicamentos de origen exclusivamente europeo con el marchamo de donaciones altruistas, por tanto, no remuneradas y voluntarias. Esto "se puede conseguir a corto y medio plazo si las legislaciones nacionales asumen el compromiso legislativo que se pide ahora al Parlamento Europeo", indican los donantes.

Por su parte, el Ministerio de Sanidad ha asegurado que España no evalúa a los donantes de sangre en función de su orientación sexual, sino del riesgo individual de transmitir algún de tipo de enfermedad.