El papa Francisco afirmó hoy que pagar salarios en negro es un "pecado gravísimo" y que los cristianos que lo hacen pero luego dan donativos a la Iglesia están utilizando "a Dios para encubrir la injusticia".

Jorge Bergoglio invitó a los presentes en la misa matutina celebrada en la capilla de la Casa de Santa Marta a preguntarse cómo es su relación con los trabajadores a su cargo y criticó a aquellos que les pagan sin satisfacer los impuestos correspondientes.

"No haga donativos a la Iglesia para soportar las injusticias que comete con sus empleados. Este es un pecado gravísimo: Es utilizar a Dios para encubrir la injusticia", afirmó.