En la última década se multiplicó por 68 el coste de vacunar a un niño en un país en desarrollo, ya que se tiene en cuenta el menor precio disponible; así se pasó de los 0,67 dólares (0,57 euros) que costaba un paquete completo de vacunas en 2001 a los 45,59 dólares (39,25 euros) en 2014, según un informe de Médicos Sin Fronteras (MSF), que denuncia la falta de transparencia el precio de las vacunas y la incapacidad de algunos países a costearse la vacunación.

En esta segunda edición del informe "La mejor vacuna'', la Campaña de Acceso de Médicos Sin Fronteras (MSF) recopila más de 1.500 datos procedentes de entidades relacionadas con el sistema internacional de inmunización, entre ellas Unicef, la Organización Panamericana de la Salud (OPS), gobiernos, empresas fabricantes de vacunas y los centros de MSF.

Como ejemplo, destaca que el precio más bajo disponible para la vacuna antitetánica, del que se beneficia Unicef, aumentó un 127% en los últimos 15 años; mientras que llama la atención que la vacuna neumocócica cueste 63,74 dólares (54,88 euros) en Marruecos, mientras que para Francia 58,43 dólares (50,33 euros).

Las farmacéuticas subieron el precio a los países pobres de vacunas que ya son rentables en los ricos

El informe, que recopila información sobre 16 vacunas clave en 13 países, "rompe el secretismo que rodea a los precios de las vacunas" y "expone algunas de las características del mercado que permiten el mantenimiento de precios altos".

"El precio es más caro, fundamentalmente, porque las farmacéuticas subieron los precios a los países pobres de las vacunas con las que ya ganan millones de dólares en los países ricos", explica Rohit Mapani, director de Políticas y Análisis de la Campaña Acceso a medicamentos esenciales de MSF.