Los españoles dedican más tiempo y muestran una mayor implicación en mejorar su inglés que el resto de estudiantes de otros países, destinando más de tres horas a la semana a estudiar la lengua, según recoge un estudio realizado entre más de dos millones de alumnos de distintas nacionalidades --Francia, Italia, Brasil, Rusia, Argentina y México, entre otras-- por la academia online ABAEnglish.com.

Así, según muestra el estudio un 52 por ciento de los alumnos españoles invierten de 3 a más horas semanales en aprender inglés, lo que supone tres puntos más que la media mundial. Por su parte, un 32 por ciento reconoce dedicarle entre una y dos horas semanales, mientras que el 16 por ciento asegura invertir menos de una hora.

Por nacionalidades los siguientes puestos del ranking en cuanto a horas invertidas lo ocuparían, en segundo lugar por detrás de los españoles, los franceses, pues un 49 por ciento reconoce invertir tres o más horas a mejorar su inglés; seguido por los mexicanos, con un 46 por ciento; los italianos, con un 44 por ciento; y los brasileños, con el 41 por ciento.

En cuanto al interés por estudiar esta lengua, España se sitúa también entre los primeros puestos con un 27 de estudiantes que lleva más de diez años tratando de lograr un nivel óptimo de inglés --a nivel mundial el porcentaje se situaría en un 24 por ciento--. En este sentido, el documento revela también que el 24 por ciento de los españoles han estudiado esta lengua entre tres y diez años; el 23 por ciento, de uno a tres años; y un 25 por ciento, menos de un año.

Por su parte, un 25 por ciento de los franceses declara llevar más de diez años estudiando inglés, seguido de un 23 por ciento de mexicanos y otro 23 por ciento de italiano, que llevarían más de diez años aprendiendo este idioma.

Respecto al nivel de inglés de los españoles, la encuesta revela que el 61 por ciento cree tener un nivel intermedio; el 31 por ciento, dice ser principiante; y el 8 por ciento, asegura contar con un dominio avanzado. Sin embargo, el estudio subraya que estos porcentajes se "invierten" cuando se mira el nivel real que está estudiando el alumno español, pues un 50 por ciento de los españoles estudia como principiante; el 43 por ciento en niveles intermedios; y únicamente los estudiantes en nivel avanzado coinciden en percepción y realidad.

El informe determina que frente a "la ilusión y las ganas" de los españoles por mejorar su inglés, surgen algunos impedimentos para que sea mayor el número de personas que estudian esta lengua. Así, para un 61 por ciento el principal problema es la falta de tiempo; seguido por la falta de constancia (para el 21 por ciento); motivos económicos (9 por ciento); la incompatibilidad de horarios (para el 5 por ciento); y un 4 por ciento lo atribuye a las metodologías "aburridas" que se imparten en las clases.