La Organización Mundial de la Salud (OMS) anunció ayer que los casos de ébola han dejado de aumentar de forma exponencial en los dos principales focos de África, esto es Liberia y Guinea, que padecen (junto a Sierra Leona) una epidemia que ha causado la muerte de 5.459 personas.

"Vemos que el número de casos ya no aumenta de forma exponencial en Liberia ni en Guinea", dijo el portavoz de la Organización, Tarik Jasarevic.

La Organización Internacional para las Migraciones (OIM), que ha abierto dos centros de tratamiento en Liberia, señaló ayer, por separado, que en este país se comunican de diez a veinte casos diarios.

Jasarevic puntualizó que en ciertas áreas de Liberia, como en el condado de Lofa, se observa un declive del número de casos y que en los últimos días no están llegando más pacientes al centro de tratamiento que funciona allí.

Sin embargo, en otras partes del país se siguen comunicando cierto número de casos.

Sobre Guinea, incluida la capital, Conakry, "vemos una situación que se estabiliza", comentó sobre el primer país donde estalló la epidemia, el pasado marzo.

Jasarevic dijo que en Sierra Leona se están viendo pocos casos en la provincia de Kenema, que también era una área de fuerte transmisión del virus, pero se observa lo contrario en Puerto Loko, con un aumento.

Esta evolución "significa que lo que hicimos funciona", opinó el portavoz, en referencia a la respuesta internacional contra el ébola, que se ha basado en la apertura de centros de tratamiento y reducir los contagios en su entorno.

"Donde se aumentó el número de camas, de sanitarios entrenados y de entierros seguros, estamos viendo resultados", señaló.

El otro pilar fundamental de la estrategia contra el ébola ha sido proveer servicios de personal entrenado para que se encargue del entierro de muertos.