Un tribunal del Jurado ha declarado hoy en la Audiencia de Las Palmas culpable de asesinato y violación, entre otros cargos, al hombre que en abril de 2010 mató a una joven de 20 años vecina suya, en el pueblo de La Lajita (Fuerteventura), tras introducirse en su casa de madrugada.

El veredicto considera probado que el acusado, Hossain E. M., marroquí, de 41 años, esperó escondido en el interior de la vivienda de la víctima y la atacó cuando ella llegó a su domicilio.

La mujer, Jessica Cararo, de nacionalidad brasileña, trató de defenderse, pero el hombre la golpeó con unas pesas de gimnasio que ella tenía en su habitación y posteriormente la apuñaló con un cuchillo que él consiguió en su cocina en el cuello, la cara y el tórax, además de con otro objeto punzante.

Tras la agresión -continúa el dictamen del Jurado-, la víctima, que aún continuaba con vida, fue violada en dos ocasiones por el hombre, quien finalmente la asfixió tapándole la boca y la nariz.

Una vez muerta, el agresor se apoderó de varios objetos de la víctima, entre ellos una tarjeta de crédito que posteriormente trató de utilizar de manera fraudulenta, y huyó del lugar del asesinato en el vehículo de la víctima.

La mujer sufrió más de 30 lesiones debido a los golpes y a las puñaladas recibidas, que le ocasionaron "un terrible padecimiento", que también considera que algunas de la puñaladas eran innecesarias y le supusieron un sufrimiento "extraordinario", relata el veredicto.

El hombre aprovechó la nula capacidad de la víctima para defenderse después de las numerosas agresiones y la violó cuando ella estaba indefensa en el suelo de su dormitorio.

Posteriormente, la subió a la cama y volvió a penetrarla por segunda vez, tras lo cual, la asfixió con una almohada o una toalla. Después, creyéndola todavía con vida, le dio un último golpe con las pesas del gimnasio, indica el pronunciamiento del Jurado.

Durante el juicio, un agente de la Guardia Civil explicó que el acusado fue detenido el 27 de abril gracias a las imágenes captadas por la cámara de vídeo de una entidad bancaria, pues se dirigió a dos sucursales bancarias para sacar dinero del cajero con una tarjeta de crédito de la víctima, aunque no lo logró al desconocer su número personal.

El veredicto del Jurado declara al acusado, por unanimidad, culpable de los delitos de asesinato, violación, allanamiento de morada, robo con violencia, hurto de vehículo a motor y estafa continuada en grado de tentativa.

El agresor se enfrenta a una pena que oscila entre los 49 años de cárcel solicitados por el Ministerio Fiscal y la acusación y los 34 años pedidos por la defensa.