Médicos Sin Fronteras (MSF) exige a los países de la Unión Europea, entre ellos a España, que mantengan "un mínimo principio de humanidad" con quienes son calificados como inmigrantes "ilegales" porque la crisis económica no justifica el dejar sin atención médica a "los más vulnerables".

Así lo han indicado, en una entrevista con Efe, José Antonio Bastos, presidente de MSF España, y el responsable de Relaciones Externas de esta ONG, Carlos Ugarte, quien ha coordinado los proyectos de atención a inmigrantes en este país.

MSF trabaja también con este colectivo en otros países de la UE como Bélgica, Italia, Francia y Grecia, y en todos ellos, ha constatado las dificultades de su acceso a los servicios de salud.

Bastos advierte de que las recientes decisiones tomadas en España, donde se retirará la tarjeta sanitaria a los indocumentados, no hacen más que empeorar su "precaria" situación.

Estas políticas, según entiende, son "peligrosas" para la salud pública, pero sobre todo son "contrarias a la ética médica" y suponen "un retroceso enorme en el respeto a la dignidad humana".

Ugarte hace hincapié en que señalar como culpables del excesivo gasto sanitario a los inmigrantes es falso, porque son una población joven que apenas usa los servicios de salud, cinco veces menos que un paciente nacional.

En su opinión, escudar su exclusión en el control del "turismo sanitario" es una "cruel ironía", por lo que reclama a la ministra de Sanidad, Ana Mato, que se ponga en la piel de aquellos que sufren enfermedades como sida, tuberculosis o cáncer o que necesitan diálisis y que, a partir de ahora, no recibirán sus tratamientos.

Ambos expertos ponen en duda la respuesta de Sanidad cuando asegura que los inmigrantes con patologías crónicas serán atendidos por las ONG, dado que este año la media de recorte de todos los ministerios ha sido del 16 % de su presupuesto y el de Asuntos Exteriores se ha elevado a un 75 %, "aplicado directamente a la ayuda oficial al desarrollo y a todos los programas de las ONG".

"Cuando estas organizaciones se plantean su propia capacidad de seguir existiendo, ya me dirás tú ahora cómo van a hacer para asumir esos tratamientos", reflexiona Ugarte, al tiempo que recuerda que determinados fármacos, como los antirretrovirales, solo se pueden dispensar en las farmacias de los hospitales.