La opción de acudir a la cirugía estética para aumentar las posibilidades de encontrar un trabajo se plantea cada vez más entre las personas desempleadas, según explica la doctora Ana Torres Maczassek, especialista en cirugía estética y reparadora.

Mujeres que han superado los cuarenta años y hombres en la cincuentena que están en el paro y buscan una nueva oportunidad, quieren sentirse mejor y tener un aspecto más radiante y atractivo, son los nuevos clientes de esta especialidad, en un momento de crisis económica como la actual.

Eliminar las bolsas de los ojos, operarse los párpados, borrar manchas de la piel que afean y delatan la edad y tratamientos de medicina estética como el relleno de arrugas muy marcadas o inyecciones de vitaminas son las demandas más frecuentes entre este tipo de pacientes.

Mejorar la presencia

Carmen Mur, consejera delegada de Manpower, empresa dedicada a selección de personal y a soluciones de trabajo temporal, señala que, al buscar trabajo, lo importante es que cada persona se sienta bien en su piel, porque "si se encuentra confortable dentro de su cuerpo estará más positiva y más abierta para encontrarlo".

Tras recordar el refrán que indica "buen porte y finos modales abren puertas principales", añade que la presencia adecuada ayuda a encontrar trabajo, y que muchas veces tener una cara más arrugada o con ojeras más marcadas puede formar parte de la personalidad, pero que "lo que no engaña es el brillo de los ojos, y eso no se arregla con la cirugía".