El científico Mariano Barbacid, del Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas (CNIO), ha explicado hoy que existen 150 tipos de cánceres distintos y cada uno de ellos es un mundo "mucho más complicado" de lo que se pensaba, por lo que se deben diseñar fármacos "únicos" y "cada vez más selectivos".

Así lo ha indicado Barbacid a los medios de comunicación después de impartir una conferencia en el marco de un congreso organizado por la Universidad de Zaragoza, en la que ha presentado los últimos resultados sobre tumores asociados al gen K-Ras, implicado en el 20 por ciento de los cánceres y en la cuarta parte de los de pulmón.

Las investigaciones de Barbacid se centran en el adenocarcinoma de pulmón y en el adenocarcinoma ductal de páncreas, "dos de los tumores más malignos que existen", ha dicho el científico, quien ha considerado que el reto es "diseñar terapias y fármacos más eficaces, cada vez más selectivos y que sean menos tóxicos".

Ha insistido en que "cada tumor es un mundo y es más complejo" de lo que se pensaba hace cuatro años, por lo que "probablemente" en su tratamiento se tendrán que "hacer combinaciones complejas de fármacos" que no se pueden hacer hoy "por su elevada toxicidad".

"Hoy en día nadie confunde el sarampión con el sida ni una gastroenteritis con una gripe, a pesar de que todas son enfermedades infecciosas y en el siglo XVI las hubiéramos confundido", ha remarcado Barbacid, quien ha considerado que la gente tiene que entender y admitir que un cáncer de mama no tiene nada que ver con una leucemia, son enfermedades distintas.

Por ello, los fármacos van a tener que ser únicos para cada tipo de enfermedad, sobre todo teniendo en cuenta que un fármaco que no puede utilizarse en un cáncer de colon sí es posible que tenga un efecto en uno de páncreas.

El que fuera director del Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas ha querido lanzar un mensaje de esperanza a la población, ha dicho que más de la mitad de los cánceres se cura pero ha insistido en la importancia de la detección temprana, porque los cánceres que mejor se curan son aquellos que puede "extirpar el cirujano".

"No hay que dar la sensación de que cáncer es igual a muerte", ha dicho el investigador, al tiempo que ha considerado que la gente tiene que entender "la magnitud del problema" y aceptar que hay muchos tumores para los que no existen fármacos eficaces.

A su juicio, en unos tumores se va a ir avanzando más rápido que en otros, y ha puesto como ejemplo que el año pasado se aprobó un fármaco contra el melanoma metastásico. En un 80 por ciento de los casos hay una respuesta favorable aunque es verdad que curaciones completas no, ha reconocido.

Por ello, ha dejado claro que su trabajo es "entender la enfermedad" y no hacer predicciones de cuándo se puede encontrar la cura para un cáncer concreto, aunque ha estimado que "no va a ser dentro de poco" y los resultados serán "incrementales, poco a poco" y no es probable "que haya una solución ideal".

Preguntado sobre la posibilidad de que la crisis y los recortes en la investigación retrasen la obtención de resultados, ha dicho que esas son cuestiones que están fuera de su capacidad de control y no ha querido hacer una valoración al respecto.

"Ahora me dedico a la ciencia y a sus resultados" y "no soy yo la persona" adecuada para contestar a cuestiones sobre "temas de política científica", ha subrayado.

Tampoco se ha posicionado sobre la situación de España respecto a otros países de la Unión Europea en lo que se refiere a avances científicos, y ha remarcado que él no es partidario de "hacer nacionalismos" ya que "en la ciencia no se debe hacer esto" porque "somos globales".

Lo que sí ha valorado es que España ya tiene un centro de cáncer, entre los cinco mejores del mundo por nivel de publicaciones, y se ha hecho "con una financiación adecuada pero justa".

Lo importante es que se vaya avanzando, lo mismo da que el descubrimiento se haga en Alemania, Inglaterra o Estados Unidos, ha concluido.