La Asociación de Afectados del vuelo JK5022, que se estrelló en Barajas hace tres años, exigieron ayer que se modifique el informe elaborado por la Comisión de Investigación de Accidentes e Incidentes de Aviación Civil (CIAIAC) sobre la tragedia que ocurrió el 20 de agosto de 2008 y que culpa directamente a los pilotos del avión.

El mismo día del aniversario, el colectivo de pilotos se sumaba a las víctimas con la misma intención: rechazar la investigación y exigir una nueva.

Los afectados por el accidente conmemoraron ayer el tercer aniversario del accidente con diversos actos.

Por la mañana se realizó una ofrenda floral en el monumento en memoria de las víctimas, situado en La Rosaleda del Parque Juan Carlos I de Madrid, donde se procedió a una lectura de poemas.

El siguiente escenario del homenaje fue la Terminal 2 del aeropuerto de Madrid-Barajas, en la que se realizó una ofrenda floral de un corazón con 154 rosas blancas encima de la placa en homenaje a las víctimas, y una lectura de poemas de familiares.

El último de los actos fue un homenaje a los fallecidos en el propio lugar del accidente, con otra ofrenda floral, y un responso oficiado por un sacerdote en su memoria.

Conocer "la verdad"

Los actos concluyeron tras unos minutos de silencio dedicados a las víctimas, según indicó la asociación, que "reafirmará el compromiso moral y personal de la Asociación en buscar la verdad de lo que ocurrió".

El tercer aniversario de la tragedia se produce en medio de la polémica generada por la publicación del informe final sobre el accidente de la Comisión Independiente de Accidentes e Incidentes de Aviación Civil (CIAIAC) sobre el accidente de Spanair

Mientras el informe final establece que la tripulación perdió el control del aparato por no haber configurado el avión correctamente, tanto la Asociación de Víctimas como el Sindicato Español de Pilotos de Líneas Aéreas (Sepla) o el Colegio de Pilotos (Copac) han pedido una revisión del documento.

En rueda de prensa, la presidenta de la asociación, Pilar Vera, consideró que el informe es un "rotundo fracaso institucional" porque "ni siquiera se aproxima al objetivo" de detectar la cadena de fallos que originaron la mayor catástrofe aérea de la aviación comercial de los últimos 25 años en España.

Vera subrayó que los pilotos no tuvieron la culpa del accidente y ha rechazado que se "cargue sobre su memoria el peso de la tragedia".

Arremetió, además, contra el Ministerio de Fomento por "olvidar por completo" su propia responsabilidad como administración competente para legislar sobre seguridad en el transporte aéreo y vigilar el cumplimiento de la normativa vigente.

Respeto a la memoria

Vera dirigió al ministro de Fomento, José Blanco, dos preguntas: "¿Quién respeta la memoria de las personas que pagaron con su vida la incompetencia de quien tenía el deber de protegerlos y quién respeta el recuerdo, rescatándolos del olvido, de los supervivientes que siguen luchando para recuperar su vida y salud?".

Por su parte, el Sindicato Español de Pilotos de Líneas Aéreas (Sepla) quiso "honrar la memoria" de las 154 víctimas mortales del accidente de Spanair ocurrido hace tres años y señaló que los fallecidos "merecen" un informe que "analice con rigor las causas profundas que provocaron el accidente, más allá del error humano" para evitar futuros accidentes, informó en un comunicado.

Tras la reciente publicación del citado informe final técnico redactado por la Comisión de Investigación de Accidentes e Incidentes de Aviación Civil, Sepla considera que "en los actuales términos" el informe no cumple la finalidad de evitar accidentes en el futuro, ya que "casi exclusivamente apunta a la actuación de los pilotos como causa directa del accidente".

En su opinión, un accidente solo ocurre "cuando se produce una cadena de errores que confluyen en un mismo punto". "Los errores humanos están presentes en la mayor parte de los accidentes aéreos. Sin embargo, las modernas técnicas de investigación inciden en la necesidad de encontrar todos los factores que tuvieron influencia en el accidente para así tomar medidas en todos los ámbitos afectados", indica el sindicato.

Ninguna mejora

Según Sepla, "apuntar únicamente al posible fallo de los pilotos puede resultar contraproducente al imposibilitar extraer ninguna recomendación de mejora de la seguridad que evite accidentes similares en el futuro".

Por este motivo, ha remitido sendas cartas al secretario de Estado de Transportes, Isaías Taboas, y a la presidenta de la Ciaiac, Rosa María Arnaldo, para pedirles la revisión de las conclusiones y recomendaciones del informe, centradas en los errores supuestos de los pilotos, en aras de mejorar la seguridad aérea a largo plazo.

"Descartar el conocimiento de las causas por las que falló el sistema de alarma TOWS no parece corresponderse con un verdadero compromiso por mejorar la seguridad; más aún cuando en el pasado ocurrieron accidentes e incidentes similares y las Administraciones no hicieron nada para corregir dichas carencias", concluye.