La Organización Internacional para las Migraciones (OIM) ha informado este martes de que aportará 276.000 euros a las comunidades del nordeste de Kenia que reciben a miles de refugiados somalíes y comparten con ellos los pocos recursos que tienen.

La OIM destinará este dinero, proporcionado por el Fondo central de las Naciones Unidas para la acción en casos de emergencia (CERF), para una campaña de seis meses por la que recibirán ayuda unos 40.000 pastores vulnerables de la región, de los cuales un 60 por ciento son mujeres.

Gracias a este dinero, las familias recibirán camellos, más resistentes a la sequía que las cabras y ovejas, y se repararán los puntos de abastecimiento de agua en las rutas del ganado. Además, se distribuirán medicamentos y suplementos alimentarios para los animales.

La OIM también colaborará en la construcción de estructuras para la recogida y el mantenimiento de agua que les permita cultivar alimentos.

La semana pasada, la ONU declaró el estado de hambruna en el sur de Somalia y varios países de la región del Cuerno de África se encuentran igualmente afectados por la sequía que ha sufrido este año la región. Las comunidades de pastores se ven especialmente afectadas por esta crisis.

"Si bien los organismos humanitarios se centran en la provisión de asistencia a los refugiados que llegan diariamente, es necesario no olvidar las necesidades de las comunidades de acogida", señaló la OIM en un comunicado.

Los tres campamentos para refugiados de Daabad, en Kenia, cerca de la frontera con Somalia, albergan ya a 383.000 personas a pesar de que tienen capacidad para 90.000.

Por otro lado, la OIM está llevando a cabo otra campaña para prestar ayuda urgente por el brote de diarrea desatado en la provincia de Turkana, en el noreste de Kenia, para ayudar a unas 55.000 personas, en su mayoría mujeres y menores de menos de cinco años. Debido a la ingesta de agua contaminada, estos colectivos son los más vulnerables a la hora de sufrir diversas enfermedades.

La organización aprovisionará la zona con medicamentos y distribuirá tabletas purificadoras de agua para contener el brote de diarrea.