En 2010, más de 1.500 jóvenes y adolescentes iniciaron el proceso educativo-terapéutico en los Centros de la Asociación Proyecto Hombre, un 44,4% más que en 2008, cuyo perfil es "más normalizado" que el de hace dos años.

Así se desprende de su situación familiar y ocupacional, ya que un 91,5% viven con ambos progenitores o con su padre o madre, y un 74,6% están "activamente ocupados", bien trabajando o estudiando o ambas cosas.

El presidente de la cita asociación, Luis Manuel Flórez, ha informado de estos datos en una rueda de prensa celebrada en el marco de las jornadas "Más allá de las drogas: nuevos retos en la intervención con jóvenes", que se celebran desde hoy y hasta el viernes, con el objetivo de formar a los profesionales que trabajan con menores y jóvenes en materia de adicciones.

El experto ha relatado que la demanda de tratamiento por consumo de cannabis se ha incrementado en casi 10 puntos respecto a los datos de 2008, un 78,53% de los casos en 2010 frente al 69,6% de hace dos años.

Sin embargo, han disminuido las peticiones de atención por adicción a la cocaína, que pasan del 18,3% de 2008 al 9,1% registrado el pasado año.

No obstante, el porcentaje medio de adolescentes policonsumidores en los Centros Proyecto Hombre es del 76,5%, es decir casi 3 de cada 4 presentan consumo de varias drogas, principalmente tabaco, cannabis, alcohol y cocaína.

La demanda de asistencia es principalmente por consumo de cannabis (un 78,53%), seguida de cocaína (9,1%) y de alcohol (3,9%), ha puntualizado Roberto Perdomo, miembro de Proyecto Hombre en Canarias.

En el caso de los centros de esta asociación, en los que se atiende principalmente a menores de edad, la demanda de asistencia por consumo de cannabis es, como media, del 81,9% y no existen por uso de heroína, éxtasis, anfetaminas y benzodiacepinas.

Respecto a los centros donde se atiende fundamentalmente a mayores de 18 años, la solicitud de apoyo por adicción al cannabis baja al 62,5% como media, mientras que aumenta la de cocaína a una de cada cinco peticiones como media, y aparece un porcentaje medio de demanda por heroína del 7,85%.

En los últimos años, ha explicado Flórez, Proyecto Hombre ha constatado un incremento de petición de ayuda de familias con hijos adolescentes y jóvenes, que acuden a sus centros con sospechas de que puedan estar experimentando o iniciándose en el consumo de drogas y otras adicciones.

Aunque en España el inicio de consumo de drogas se mantiene en edades tempranas, en torno a los 14 años, la edad media de los adolescentes atendidos en Proyecto Hombre es de 17,13 años, porque es cuando empiezan a "tener problemas", ha explicado Nicolás Condés, quien trabaja en esta asociación en Canarias.

Los adolescentes atendidos en 2010 fueron preferentemente hombres, una media del 81,3%, mientras que en el 63,5% de todos los afectados viven con ambos progenitores.

Un 24,4% viven con su madre (sola o con su pareja actual) y sólo en el 3,6% de los casos viven con su padre (solo o con pareja actual).

En comparación con los datos del perfil del año 2008, ha aumentado el porcentaje de adolescentes que viven con ambos padres y ha disminuido el de aquellos institucionalizados o que vivan solos, en pareja o con otros familiares.

Los datos muestran que el 74,6% de los atendidos en 2010 están "activamente ocupados", bien trabajando o estudiando o ambas cosas, si bien el porcentaje más representativo es el 63,5% de estudiantes.

El presidente de la asociación ha considerado que el hecho de que los jóvenes cuenten con una "estructura estable" es más positivo a la hora de rehacer sus vidas y, por ello, se ofrecen herramientas educativas tanto para los adolescentes como para sus familias.