Unos 358.000 casos de mortalidad materna se registraron en el mundo en 2008, lo que supuso un descenso del 34 por ciento respecto a los niveles de 1990, pero el 99 por ciento de todas las muertes siguieron ocurriendo en los países en desarrollo.

Así lo destaca un estudio conjunto publicado hoy por tres agencias de la ONU y el Banco Mundial, cuando faltan cinco años para llegar al plazo de 2015 establecido para el cumplimiento de los Objetivos del Milenio, entre lo cuales uno pide reducir la mortalidad materna en tres cuartas partes y otro lograr el acceso universal a la salud reproductiva.

La región subsahariana y la del Sur de Asia acumularon conjuntamente el 87 por ciento de todas las muertes maternas globales, con 313.000 fallecimientos en 2008, el año analizado en el estudio.

Y el 65 por ciento de todos los casos tuvieron lugar en sólo 11 países: Afganistán, Bangladesh, la República Democrática del Congo, Etiopía, India, Indonesia, Kenia, Nigeria, Pakistán, Sudán y Tanzania.

Las estimaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Unicef, el Fondo de Naciones Unidas para la Población (UNFPA) y el BM revelan que en 2008 se registraron 42.000 muertes de mujeres embarazadas debido al virus del HIV/Sida, de las cuales la mitad se considera que se debieron a causas directamente relacionadas con la gestación.

La OMS define la mortalidad materna como "la muerte de una mujer cuando está embarazada o en los 42 días posteriores al fin de la gestación, independientemente de la duración y lugar del embarazo, y debido a alguna causa relacionada o agravada por éste o por su gestión, pero no por causas accidentales".

En el África Subsahariana, el 9 por ciento de todas las muertes maternas se debieron al virus del Sida, y el estudio destaca que sin estas muertes, la tasa de mortalidad materna en esta región hubiera sido de 580 muertes por cada 100.000 nacimientos en lugar de 640.

Por regiones, la más alta tasa de mortalidad materna fue la citada de 640 en África Subsahariana, seguida del Sur de Asia, con 280 muertes por cada 100.000 nacimientos, Oceania (230), Sudeste de Asia (160), Norte de África (92), Latinoamérica y el Caribe (85), Asia del Oeste (68) y Asia del Este (41).

Cuatro países tuvieron en 2008 una tasa extremadamente alta de mortalidad materna, con al menos 1.000 muertes por cada 100.000 nacimientos: Afganistán, Chad, Guinea Bissau y Somalia.

Durante el periodo 1990-2008, 147 países experimentaron un descenso en la tasa de mortalidad materna, pero los avances no han llegado al mínimo necesario de reducirla un 5,5 por ciento anual desde 1990 que permitiría lograr el Objetivo del Milenio de reducir estos fallecimientos en un 75 por ciento para 2015.

Las agencias involucradas estiman que los avances en este terreno han sido modestos aunque en algunos casos esperanzadores, pero que aún se requieren de mayores esfuerzos.