Canarias, Asturias y Cataluña son las comunidades autónomas que registraron las tasas más altas de disoluciones matrimoniales -divorcios, separaciones y nulidades- en 2009, según datos facilitados por el Instituto Nacional de Estadística (INE). Canarias encabezó la tasa de las disoluciones, con un 2,83 por cada mil habitantes, seguida de Asturias (2,62), Cataluña (2,61), Baleares (2,54) y Comunidad Valenciana (2,48), además de la ciudad autónoma de Ceuta, que registró un 3,04. Por el contrario, las tasas más bajas se dieron en Castilla-La Mancha (1,65), Extremadura (1,70) y Castilla y León (1,72). En número de separaciones, Andalucía se situó a la cabeza, con 1.592, seguida de Cataluña, 1.357, y Madrid, 984. En cuanto a las nulidades, Andalucía contabilizó el mayor número (23), Madrid (18) y Cataluña y Comunidad Valenciana, 16 en cada caso, según las estadísticas.