El Papa Benedicto XVI dijo ayer que hay que cambiar el estilo de vida porque "el mundo es nuestra casa común que hay que respetar", tras el rezo del primer Ángelus del año en la Plaza de San Pedro y celebrar la misa con motivo de la 43 Jornada Mundial de la Paz.

El Papa Ratzinger insistió como en la misa precedente "en el uso de la justicia y la sabiduría los recursos naturales de la Tierra" y subrayó la importancia que en la tutela del ambiente "tienen los particulares, la familia y las administraciones locales", aunque aclaró que "si hay que cuidar a las criaturas que nos rodean, más habrá que hacerlo con las personas". "Se necesita ya un efectivo cambio de mentalidad que induzca a todos adoptar un nuevo estilo de vida", afirmó.

"De hecho -continuó-, todos somos responsables de la protección y el cuidado de lo creado". Además, fundamentó en la educación la necesidad de aprender a respetar la naturaleza, orientada siempre a "construir la paz a nivel personal, familiar, comunitario y político", concluyó.