"La mayoría de los taxistas no queremos el uniforme y en todo caso debería votarse la medida. Aunque ya se hizo en mayo de 2014, junto a otras cuatro preguntas, en el pabellón Pancho Camurria y el sector se pronunció en contra". Lo asegura Fidel Coello, profesional con treinta años de experiencia y directivo de Taxi Driver. Una voz discordante en la que parecía unanimidad ante esa uniformidad.

"En realidad -aseguró Coello-, es uniformidad y no un uniforme porque saldremos a la calle con camisas azules distintas o pantalones y faldas negros de todo tipo". Añadió respecto a la posibilidad de ser subvencionados para la ropa, valorada en unos 100 euros por cabeza: "Si nos lo imponen, como han hecho, algo habitual porque siempre acaban decidiendo lo contrario de lo que quiere el taxista, lo lógico es que lo paguen".

Coello Cruz cuestiona la representatividad: "Siete señores a favor más una abstención opinaron por 897 taxistas. Porque no votaron en la reunión del pasado 24 de noviembre. Pero a eso se agarró el alcalde tras el acta levantada en la siguiente reunión, el 22 de diciembre por el secretario municipal. Y en el BOP se publicó que se votó modificar el artículo 7. El alcalde tiene potestad para imponer el uniforme, pero no porque el sector lo quiera". Coello añade que "solo Élite Taxi hubiera preferido esperar a constituir la Mesa del Taxi y votar allí, mientras la UTAT, que no estuvo ese día, mostró su desacuerdo". La propuesta fue aprobada por la Junta de Gobierno el 7 de diciembre.

Fidel Coello pide "que se vote uniforme sí o no, aunque ya ganó el no". Además, invita a reflexionar respecto a las elecciones de representantes prevista para finales de febrero o principios de marzo.

Miguel Ojeda, presidente de Élite Taxi Tenerife, remarca que "en el momento actual el sector necesita un cambio de imagen. Y si este cambio tiene que venir con el uniforme, pues bienvenido". No obstante, aclara que no están de acuerdo con la imposición. "Queremos recordar que el ayuntamiento llevó este asunto a votación y, aunque fue por poco margen, es cierto que ganó el no".

Además, indica que "los colores, las formas y los tiempos los han dominado ellos en todo momento. No han contado con el sector en absoluto, ni tan siquiera para valorar si queremos que el polo sea azul celeste o de otro color". "Lo han impuesto", remarca.

"Y lo peor es que tenemos que empezar el día 1 de febrero y el ayuntamiento no ha dado nada. Y si ellos imponen, lo lógico es que paguen", añade.

Por su parte, Víctor Melián, presidente de Radio Taxi Isla de Tenerife, aseguró ayer que "no pude asistir a la reunión del 24 de noviembre, pero estamos completamente a favor del uniforme".

Obligatorio desde el día 1

"Mantenemos el próximo 1 de febrero como punto de partida obligatorio para la uniformidad de los taxistas y en ningún caso nos planteamos subvencionarlos como no se ha hecho en ningún municipio de Canarias donde se tomó una medida similar. El gasto lo deben asumir los propios taxistas". Lo dijo ayer el concejal de Servicios Públicos, Dámaso Arteaga, quien adelantó: "Trabajamos desde la Sociedad de Desarrollo y el Cabildo para suministrar dos polos de color azul celeste por licencia con el logo de la ciudad y de la isla porque ellos son la primera imagen de ambas para el visitante". Sobre el apoyo del sector, "lo creemos mayoritario. Como referencia para la ordenanza municipal se hizo en su día un referéndum y por unos votos ganó el no al uniforme. Pero, con matices, la opción global del colectivo es hoy muy favorable al mismo".