Las fuertes lluvias caídas el lunes y martes pasados en Santa Cruz de Tenerife no han afectado a la cantidad ni a la calidad del abastecimiento de agua en el municipio, según ha podido comprobar la Empresa Mixta de Aguas de Santa Cruz de Tenerife (Emmasa). En cambio, sí se produjeron varios incidentes en las redes de saneamiento que, sin embargo, fueron rápidamente detectados y solucionados por los equipos de la compañía.
A las ocho de la mañana del pasado lunes se activó el protocolo de emergencia de Emmasa, que establece acciones, medidas y metodologías en los casos de urgencia, incluido el desarrollo de fenómenos metereológicos adversos. Bajo la dirección de un comité constituido al efecto un total de 36 operarios y técnicos trabajaron durante el lunes y el martes para atender ordenadamente las incidencias que se fueron produciendo. Los tres equipos organizados contaron con la dotación de tres camiones de impulsión-succión de lodos y varios vehículos auxiliares.
Se atendieron un total de 38 incidencias en las redes de saneamiento. En su gran mayoría fueron obstrucciones en las redes y salideros y desplazamiento de tapas de registro (conocidas como tapas de alcantarilla). De la misma manera, desde primera hora de la mañana del lunes se pusieron en funcionamiento los aliviaderos con los que cuentan las redes, que fueron inspeccionados regularmente mientras se prolongó la alerta por lluvias. Por último, se mantuvo una especial atención sobre las zonas inundables (avenida Reyes Católicos, avenida Venezuela, ermita de Regla y alrededores del Pancho Camurria) sin que se detectase ningún problema.
El protocolo de emergencia de Emmasa quedó desactivado a las 18 horas del pasado jueves y a primera hora de la tarde de hoy miércoles todas las incidencias habían quedado satisfactoriamente resueltas.