La organización del Carnaval pidió el martes pasado a los diseñadores que recorte el tamaño de sus trajes y lo iguale con los de Las Palmas. Se pasaría de 5 metros de ancho, 5 de alto y 6 de fondo a 4,5x5x5. El motivo es que medio metro puede dificultar a los bomberos la extinción de un posible incendio. Recortar 50 centímetros sería el único cambio en las bases, después de que el alcalde desautorizara al concejal de Fiestas y diera marcha atrás en su intento de exigirles una póliza de 600.000 euros de responsabilidad civil. De nuevo, el seguro municipal lo cubrirá. Los diseñadores ven "el recorte de una pluma de 50 centímetros como una lucha política para justificar la polémica y estudian si aceptan presentar así.